Gente como uno (GCU)

Una escena común al ver un informe de mercado
es asumir que tiene información equivocada, porque todos los que conozco tienen
microondas, secadoras de ropa o termas y la verdad es que no todos los que
conoces son el mercado.

Esta extrapolación errada de lo que usan,
consumen o compran mis amigos (gente como uno) llevado al universo es más
evidente y tergiversado cuando se analiza un mercado de provincias donde además
se suman paradigmas.

Incluso muchas técnicas que en ciudades
grandes funcionan muy bien como los(as) isócronos(as). Hay ciudades con menos
de medio de millón de habitantes donde un(a) isócrono(a) de 15 minutos en auto,
cubre el 90% de la ciudad, por tanto la zona de influencia de un local
comercial termina siendo toda la ciudad.

Hace días revisaba un informe de hábitos y
tenencia de bienes en provincias, donde se podía encontrar por ejemplo que el
poder de las cajas municipales en muchas ciudades aún es fuerte o las radios
locales de noticias siguen siendo muy escuchadas  o la posta médica sigue siendo el punto de
salud más visitado. Entre la audiencia joven y sofisticada, en su mayoría, en cada
punto había sorpresa, no se podía creer que a nivel nacional la tenencia de
autos de uso personal no supera el 15%, ya que en su entorno todos tienen auto.

Otra extrapolación común es asumir que lo que
pasa en Lima  pasa en el resto del país.
En Lima es claro que en este invierno San Pedro ha prendido el aire
acondicionado con furia, convirtiendo a la ciudad capital en una heladera (como
mucha gente de Medellín o Cali se refiere a Bogota). En el resto del país no
necesariamente estamos en lo mismo, de hecho en varias ciudades brilla esplendorosamente
el sol.

La seguridad es otro aspecto, que incluso el
presidente ha determinado como prioritario. Bienvenidas todas las acciones en pro de la
seguridad, pero si revisamos encontraremos que en muchas ciudades la
inseguridad se ha incrementado en menor proporción y dramatismo que en Lima.
Quizá haya otras prioridades mucho más urgentes.

Pasa lo mismo con temas que tienen relevancia
en las regiones del Perú y son desconocidos cuando vivimos dentro de nuestra
burbuja GCU, la revocatoria tiene una enorme presencia histórica en el país,
pero antes que llegara a Lima (recientemente por el caso Villarán), muchos ni
sabían de su existencia y los efectos negativos en el gobierno de una ciudad.
Sucede lo mismo con la comisión otra-plaza que cobran los bancos que afecta
principalmente a las regiones y no tiene mayor eco en Lima.

Para evitar extrapolar nuestro GCU al universo,
usaré una frase que alguna vez un profesor me dijo en clases, “..los usos y
costumbres de tus amigos, sólo representan en el mejor de los casos el 2% de la
población, así que debes asumir casi con certeza que el otro 98%  tiene gustos diferentes…”

En resumen, dado la vorágine en que pasan los
días y los nuevos hábitos, en estos días la tendencia debe ser la de no asumir
sino más bien debe ser la de trabajar en todos los frentes posibles e
investigar. En nuestro nuevo Perú, todo está por hacerse.