¿Qué vino elegir para acompañar comida japonesa?

La cocina japonesa es conocida por su frescura, delicadeza y equilibrio de sabores. Acompañar adecuadamente estos platos con el vino correcto no solo realza la experiencia culinaria, sino que también permite apreciar mejor las sutilezas y complejidades de cada bocado. Recordemos que un buen maridaje radica en la capacidad de complementar y elevar los sabores, creando una armonía perfecta entre la comida y la bebida.

Aunque tradicionalmente se asocia la comida japonesa con el sake, el maridaje con vino ofrece una alternativa fascinante que puede resaltar diferentes aspectos de los platos. Los vinos, con su amplia gama de perfiles de sabor, pueden complementar y realzar la cocina japonesa de maneras únicas e inesperadas. También podemos ensayar maridajes con coctelería, pero eso será en una siguiente entrega.

La tradición culinaria japonesa se basa en ingredientes frescos y técnicas precisas que resaltan el sabor natural de los alimentos. Por ello, hay que tener cuidado al elegir el vino adecuado para no opacar estos sabores delicados. Un maridaje bien pensado puede transformar una comida en una experiencia sensorial inolvidable, donde cada sorbo y cada bocado se complementen mutuamente.

Mi experiencia en Hiro

Para entender, ensayar y aprender de maridaje, hay que probarlo todo. Podemos tener una base o una idea de acuerdo a las características de los vinos y los platillos, pero son nuestros sentidos los que tendrán la última palabra.

Por ello recientemente, estuvimos en Hiro, para disfrutar un maridaje muy especial creado por el chef Andrés Diaz Hirata, en los platillos  y el sommelier  José Bracamonte, quien tuvo a cargo la elección de las etiquetas. Así estuvo:

1. Sake Tartar y Nigiri de Pescado con Shiitake Butter. Vino Acompañante: Doña Isadora, Bodega Cousiño Macul (Cepa: Riesling)

• El sake tartar y el nigiri de pescado con mantequilla de shiitake se complementaron maravillosamente con el Riesling. Este vino, con sus notas frutales y acidez equilibrada, realzó los sabores umami del shiitake y la frescura del pescado, creando una combinación armoniosa y refrescante. Para quien no probó todavía riesling, no se sorprenda por sus notas a cera de abeja o a hidrocarburo. Así es esta uva.

2. Pejerrey Nanbanzuke y Hotate Misoyaki. Vino Acompañante: Colección, Bodega Rutini (Cepa: Gewürztraminer)

• El pejerrey nanbanzuke y el hotate misoyaki encontraron su pareja ideal en un Gewürztraminer. Las notas florales y especiadas del vino complementaron los sabores agridulces del nanbanzuke y la riqueza del misoyaki, ofreciendo una experiencia gustativa equilibrada y compleja.

3. Shiitake Tempura y Beef Tataki. Vino Acompañante: Cadus Appellation, Bodega Cadus (Cepa: Malbec) 

• La tempura de shiitake y el beef tataki maridaron muy bien con el Malbec. Las notas de frutos rojos y taninos suaves del vino realzaron la textura crujiente de la tempura y lo jugoso del tataki, creando una combinación, digamos,  robusta.

4. Buta Kakuni y Spicy Ebi Flameado. Vino Acompañante: De Muerte Gold, Bodega Winery On (Cepas: Monastrell y Syrah, Tintorera)

• El buta kakuni y el ebi flameado picante se complementaron adecuadamente con el vino De Muerte Gold. Las cepas Monastrell y Syrah, con sus notas intensas y especiadas, equilibraron la riqueza del buta kakuni y el picante del ebi flameado, ofreciendo un final interesante para la comida.

Mis maridajes favoritos fueron el de Nigiri de pescado con Shiitake butter el Hotate Misoyaki el Shiitake Tempura y el spicy ebi flameado, con sus respectivos vinos Pero, como siempre, recomiendo probarlo todo.

Así que ya tienen algunas ideas para maridar platillos de cocina japonesa tradicional. Por cierto, estas etiquetas de vino las pueden encontrar además en Kahan Licores quienes traen el producto a nuestro país. ¡Salud!