Los créditos a empresas se desaceleraron en febrero a un ritmo de crecimiento anual de 5.2% (5.8% en enero), según el BCR.
En particular, los préstamos a medianas empresas se contrajeron 2.1%, siendo el único tipo de financiamiento a compañías que decrece.
La morosidad de este tipo de crédito es la más alta del sistema financiero, por lo que las entidades prestamistas tienen más exigencias en su evaluación para un nuevo desembolso, indicó a Gestión Wilber Dongo, gerente central de Negocios de Caja Arequipa.
La mora de las medianas empresas subió a 9.47% al cierre del 2021, por encima del 6.07% reportado un año atrás, según datos de la Superintendencia de Banca, Seguros y AFP (SBS).
Compra de deuda
“Las cajas municipales están dejando de competir en este segmento (mediana empresa) y se lo están dejando a los bancos que, por sus bajos costos de fondeo, pueden ofrecerles mejores tasas de interés”, sostuvo Ramiro Arana, gerente de Negocios de Caja Huancayo.
La pandemia condujo a muchos negocios a la informalidad y la banca busca llegar a las pocas empresas medianas que quedan en el mercado a través de la compra o consolidación de deuda, manifestó.
Según Dongo, la mediana empresa aún muestra mucha informalidad y la mayoría trabaja en conglomerados comerciales, pero necesitan mejorar su competitividad mediante transformación digital de sus procesos internos y en la venta de productos, lo que les genera elevados costos operativos.
Los tickets de préstamo a medianas empresas son superiores a los de la mype, lo que afecta el indicador de mora de las cajas municipales, acostumbradas a montos más bajos, refirió Arana.
“Como Caja Huancayo continuamos atendiendo estos créditos, aunque ya no lo hacemos como antes de la pandemia. El foco está más en financiamiento a la micro y pequeña empresa, así como en créditos de consumo”, dijo.
Riesgosas
Por su parte, Jorge Ochoa, past president del gremio de la pequeña empresa de la Cámara de Comercio de Lima (CCL), comentó que muchas empresas medianas están saliendo de la crisis pandémica.
Durante la emergencia estas empresas recibieron fondos de Reactiva Perú, aunque ya tenían créditos vigentes que no pudieron refinanciar o prepagar con los recursos de dicho programa, por los lineamientos que este establecía, precisó.
“Los bancos deberían flexibilizar un poco más el crédito; cuentan con liquidez para dar préstamos, pero piensan que las medianas empresas son riesgosas”, aseveró.