Recientemente, el nobel de Economía, Robert Shiller, declaró a un medio internacional que “no existe una pandemia, sino dos”.
Con ello, quiso resaltar que además de la pandemia de Covid-19, los ciudadanos vienen enfrentando una pandemia de ansiedad financiera por las consecuencias económicas que generará la crisis sanitaria.
Al respecto, el economista Jorge González Izquierdo, señaló que el efecto de la pandemia sobre las economías a nivel mundial se trasladó a los mercados financieros y, en un primer momento, condujo a las empresas a buscar liquidez.
Esto derrumbó las bolsas del mundo en marzo e hizo que algunos peruanos perdieran dinero de sus fondos previsionales, en especial quienes están en los fondos 2 y 3 que cuentas con instrumentos extranjeros de mayor riesgo (acciones), agregó.
Sin embargo, sostuvo que entre abril y mayo, los grandes inversionistas ya no deseaban tanto tener liquidez sino que buscaban vehículos que les generen rendimientos y que les de confianza como bonos.
Eso beneficia a países como Perú pues les da la posibilidad de salir y emitir bonos en el extranjero para captar los recursos que necesitan a una baja tasa de interés, añadió.
Por tanto, en cuanto al mercado bursátil, el especialista considera que “esta segunda pandemia no afecta directamente pero sí repercute de alguna forma en el país”.
Informalidad
En tanto, González Izquierdo refirió que en el segmento informal sí se podría estar presentando esta pandemia de ansiedad financiera.
“Pese a que no hay estadísticas de este sector, mi percepción es que el ahorro de estas personas cayó fuertemente porque su ingreso se redujo a cero y han tenido que comerse sus ahorros”, estimó.
Además, se están endeudando entre ellos y por canales informales lo que empeora la situación, acotó.
Por otro lado, el especialista no prevé que la pandemia de ansiedad financiera afecte al sector formal pues los créditos, a diferencia de lo que muchos podrían esperar, se han desacelerado.
Mientras que los depósitos, según datos del Banco Central de Reserva (BCR), se venían incrementando pues al estar obligados a permanecer en cuarentena, los peruanos redujeron sus gastos y podían ahorrar más, mencionó.