El último domingo se emitió el reglamento de la ley para la reprogramación o congelamiento de deudas.
Si bien las entidades financieras aun no están ingresando solicitudes de estas operaciones garantizadas por el Gobierno, son muchos los deudores que están comunicándose con los bancos para conocer sobre este beneficio.
“Cada cliente conoce su situación actual y eso es lo que debe explicar a la entidad con la que tiene un financiamiento para que sean conscientes de hacerle un cronograma de pagos acorde con ello”, dijo el gerente central de Negocios de Caja Arequipa.
Según Wilber Dongo, las microempresas que deseen reprogramar su deuda con garantía deben identificar, primero, el porcentaje de normalidad en el que se ubican a la fecha, si se han recuperado o aun refleja una producción y ventas por debajo de sus niveles pre pandemia.
Muchos de los negocios que reprogramaron las deudas que tenían hasta febrero, las pagaron anticipadamente con el objetivo de solicitar nuevos y mayores créditos para su campaña de cierre de año, agregó.
En la misma línea, mencionó, están los clientes que perdieron su trabajo y quienes mantienen su empleo pero con un menor salario.
Las personas recién dejaron de trabajar y están ingresando a uno nuevo o aun no consiguen trabajo, podrían solicitar a las entidades financieras periodos de gracia entre tres a seis meses, dependiendo de su situación, sugirió.
“Esta medida servirá para brindarles cierta esperanza a estos clientes y que puedan pagar su deuda apenas consigan un nuevo trabajo”, acotó.
Asimismo, comentó que si el deudor tiene un trabajo pero con ingresos por debajo de los meses pre pandemia, se torna una situación similar al de los negocios.
Por tanto, recomendó a los dos últimos casos mencionados solicitar cuotas escalonas en función de los flujos de ingreso que estiman tener en los próximos meses.
“El banco puede reprogramarle las primeras seis cuotas más bajas para que desde el sétimo pago, cuando la economía probablemente esté más recuperada, el cliente vuelva a pagar los montos de antes pues sus ingresos serán más estables”, expresó.
Dongo reiteró que el cliente debe ser sincero respecto de su panorama a fin de que la entidad financiera le ofrezca una cuota que pueda pagar, pues a ninguno le beneficia que la deuda no sea pagada.