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Desde el Ejecutivo -según adelantó hace dos semanas el ministro del Ambiente- se alistan la emisión de incentivos económicos para promover la adquisición de autos eléctricos lo que tendrán un efecto sobre el ambiente. Los mismos se harían público -dijo el ministro- antes de que termine el mandato de Francisco Sagasti.
A esta situación se suma que -en mayo próximo- saldrá el reglamento para el funcionamiento de las estaciones de carga eléctrica, con miras a promover el uso de autos eléctricos en el Perú y avanzar hacia la electromovilidad.
Si bien se están dando los primeros pasos para su masificación, ¿qué acciones aún faltan?
Ellioth Tarazona, gerente técnico normativo de la Asociación Automotriz del Perú (AAP), explicó que una medida que podría implementarse -como parte de los incentivos que alista el Gobierno- es la de exonerar por los próximos diez años el pago del IGV y el Impuesto al Patrimonio Vehicular (IPV) para promover la adquisición de autos eléctricos.
También calificó como una buena medida o idea la de otorgar bonos, tomando en cuenta que en el Perú todavía es caro adquirir un auto eléctrico. “En el mercado un auto eléctrico oscila entre US$ 30,000 a US$ 40,000 aproximadamente. Es un monto elevado en comparación a los autos a diésel”, precisó a Gestión.
Por ejemplo -detalló- en España se dispuso la entrega de bonos de hasta US$ 5,000 como un incentivo para la compra de vehículos eléctricos. “Lo que planteamos es la entrega de un bono equivalente al 10% del valor del vehículo, sería un incentivo bastante fuerte para que las familias se animen por la compra de un auto eléctrico”.
Aclaró que los bonos se aplicarían como un descuento a la hora de adquirir un vehículo.
“Desde el Estado no debería verse como un gasto sino como una inversión con la llegada de vehículos eléctricos se reduce a cero la emisión de gases contaminantes que tienen un costo significativo en la sociedad a la larga”, precisó.
-Lo que se pierde-
Una de las desventajas de los autos eléctricos es que su adquisición todavía sigue siendo cara en Perú. “Los autos eléctricos todavía son 35% más caros que los autos convencionales y esto se debe a los costos de las baterías de litio los que siguen siendo costosas”, refirió.
No obstante, agregó que se esperaría que el costo de la baterías de litio empiecen a bajar, conforme pasen los años.
“Se espera que para el año 2024/2025 estén por debajo de los US$ 100 el kilowatt/hora y va ser que un vehículo convencional -ya sea gasolinero o petrolero- cueste lo mismo que un vehículo eléctrico”, acotó.
-Lo que se gana-
Si bien -añadió el representante de la AAP- el costo/adquisición de un auto eléctrico es caro, esta inversión se compensa con el bajo costo de operación/mantenimiento que demanda este vehículo.
“El costo de adquisición de un auto eléctrico, en estos momentos, sigue siendo mayor en relación a un vehículo gasolinero/diésel. Sin embargo, el costo de operación -actualmente- es mucho más barato. Si se gasta -por ejemplo- S/ 100 para movilizarse en su auto diésel, pero si se traslada a un vehículo eléctrico, el gasto se reduce en aproximadamente 70%. Es decir, gastaría solo S/ 30 y los S/ 70 restantes se convierten en ahorro”, detalló.
En esa línea, dijo que el vehículo eléctrico es una opción para aquellas personas que recorren más kilómetros a día ya que les permite generar ahorros.
“Por ejemplo, es una buena opción para los taxistas. Ellos recorren generalmente 200 kilómetros al día por lo que el ahorro de dinero va ser muy significativo. Al igual que para el transporte público, ya que les genera un ahorro de 70% respecto a lo que se gasta en gasolina”.
-Electrolineras, cuántas se podrían instalar-
Otro detalle vital para la masificación del uso de autos eléctricos es que existan electrolineras, que son centro de recargas de estos autos.
Tarazona explicó que en Lima hay centros de recargas de autos eléctricos, que todavía están a modo de prueba debido a que la cantidad de vehículo eléctricos en circulación en Perú todavía es bastante baja.
“Apenas hay 55 autos eléctricos en circulación desde el año 2015. Mientras que ya se han superado los 1,000 vehículos híbridos. Estos son autos con motor eléctrico y gasolinero”.
De emitirse el reglamento para el funcionamiento de las estaciones de carga eléctrica, ¿cuántas electrolineras podrían instalarse?
Ello dependerá -sostuvo el gerente de la AAP- del crecimiento del parque automotor de autos eléctricos, “ya que aquellos que se destinen para un servicio público como los taxis van a requerir cargarse a diario. En cambio, una persona que lo compre para su uso particular, basta con que lo cargue en su domicilio, su funcionalidad va durar durante toda la semana si no se tiene un recorrido extenso”.
Así consideró que el reglamento debería contener medidas que impulsen al inversionista a instalar electrolineras sin mucha burocracia.
“Respecto a la zonificación exigida para instalar una electrolinera podría ser similar a la que se exigen a los grifos. Por otro lado, se debería permitir que se instalen cargadores de vehículos eléctricos en centros comerciales y en estacionamientos/parqueos ubicados en la vía pública”, puntualizó.
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