El cadáver del cabecilla terrorista Abimael Guzmán continúa en custodia en la morgue del Callao, pese a que ya se cuenta con una ley promulgada que dispone su incineración. El fundador de Sendero Luminoso falleció el sábado 11 de setiembre en su celda de la Base Naval, en donde cumplía cadena perpetua.
Según mostraron las cámaras de Canal N la noche de ayer, continúa estando presente un fuerte resguardo policial en los exteriores de la morgue del Callao, en donde permanece el cuerpo del genocida. En este recinto se le practicó la necropsia de ley, así como exámenes antropológicos, de odontología forense, biología y de ADN.
La ley que permite su cremación fue promulgada por el presidente Pedro Castillo el pasado viernes y entró en vigencia desde el día sábado. Es responsabilidad del Ministerio Público disponer la incineración de los restos. Posteriormente, el Ministerio de Justicia debe esparcir las cenizas de manera reservada.
-¿Qué establece la ley que permite su cremación?-
El Congreso de la República aprobó el último jueves un proyecto de ley que incorpora el artículo 112-A a la Ley 26842, Ley General de Salud, referido al destino de los cadáveres de fallecidos que cumplían condena por traición a la patria o terrorismo.
“En el caso del cadáver de un interno que venía cumpliendo condena con sentencia firme por los delitos de traición a la patria o de terrorismo, en su condición de líder, cabecilla o integrante de la cúpula de organizaciones terroristas, cuya entrega, traslado, sepelio o inhumación ponga en riesgo la seguridad nacional o el orden interno, el fiscal competente, en decisión motivada e inimpugnable, dispone su cremación, previa necropsia”, dice el documento.
“La Autoridad Sanitaria, en coordinación con el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos y el Ministerio del Interior, ejecuta lo dispuesto en un plazo máximo de veinticuatro (24) horas. La cremación se realiza en presencia de un representante del Ministerio Público, para fines de identificación, quien levanta el acta correspondiente”, añade.
Hasta el momento las autoridades no han informado a qué crematorio será enviado el cuerpo de Guzmán.
-Crematorio privado no lo recibirá-
El crematorio privado Piedrangel informó la semana pasada, a través de un comunicado, que no brindará sus instalaciones para incinerar los restos del fallecido Guzmán, en caso estas sean requeridas por las autoridades del gobierno. Según indicaron, la decisión se tomó por una “cuestión de convicción y solidaridad con las miles de inocentes víctimas producto del terrorismo”, y no por cuestiones políticas.
La referida empresa también expresa su rechaza “al terrorismo y, en especial, a quienes sembraron sangre y muerte en el país como parte de los grupos genocidas Sendero Luminoso y el Movimiento Revolucionario Tupac Amaru – MRTA”.
Por esta razón sus directivos aseveran que “fieles a nuestros principios hemos tomado la decisión unánime de desistir de realizar ese servicio funerario”.
-Cadena perpetua y muerte de Guzmán-
Abimael Guzmán, capturado en 1992, recibió la máxima condena carcelaria por sus acciones terroristas que empezaron en mayo de 1980. Primero lo condenó un tribunal militar el mismo año de su captura, y luego un tribunal civil en el 2006.
El senderista había sido trasladado el pasado 20 de julio desde su centro de reclusión en la Base Naval a un hospital cercano debido a inconvenientes en su estado de salud. Días atrás había sido atendido por presentar “inapetencia recurrente” y “presión baja”.
Sin embargo, el cabecilla de Sendero Luminoso rechazó ser trasladado nuevamente a un centro médico, pese a que los resultados de sus exámenes de laboratorio previamente realizados concluyeron que necesitaba atención médica especializada.
Pese a ello, tras conversar con su abogado defensor, el interno fue trasladado de forma voluntaria en una ambulancia SAMU a un hospital cercano al Cerec, donde recibió atención médica.