Unas 25,000 personas se dedican a la minería ilegal en Ayacucho

Alrededor de 25,000 mineros informales desarrollan actividades en la región surandina de Ayacucho, los cuales están concentrados principalmente en cuatro provincias, reveló hoy el presidente regional ayacuchano, Wilfredo Oscorima Núñez.

Detalló que la mayoría de estos trabajadores opera en las localidades de Coracora, Pausa y Puquio, capitales de las provincias de Parinacochas, Páucar del Sara Sara y Lucanas, respectivamente; así como en la provincia de Sucre.

La autoridad regional especificó que en las referidas localidades se extraen diversos minerales, en especial oro.

"La situación de la minería informal en Ayacucho es un tema preocupante y complejo, pues según información estimada de la Dirección Regional de Energía y Minas tenemos unos 25,000 mineros informales. No tenemos un censo al respecto", dijo a la Agencia Andina.

Oscorima indicó que lo ocurrido con el trabajador Medardo Gutiérrez Díaz, quien murió esta madrugada tras permanecer atrapado en la mina Luicho, en la provincia de Páucar del Sara Sara, resulta necesario trabajar intensamente en la formalización de este sector para evitar nuevas tragedias.

Refirió que su gestión trabaja en la convocatoria y en jornadas de sensibilización para invitarlos a laborar de manera conjunta en su formalización.

El viceministro de Minas, Guillermo Shinno Huamaní, señaló el viernes que unas mil personas trabajan extrayendo minerales de manera informal del cerro Luicho, ubicado en el distrito de Colta.

"Es un gran número de personas porque se trata de un cerro bastante grande, de muchas hectáreas (108 a 110), algunos mineros trabajan por temporadas y otros todo el tiempo; pero son un promedio de mil los que siempre están acá con sus familias", indicó.

Shinno explicó que el cerro Luicho tiene una suerte de huecos o forados, cada uno de los cuales forma una mina, la misma que es operada por grupos de mineros informales.

Hoy hizo un nuevo llamado a los mineros informarles a trabajar en la legalidad y en condiciones de seguridad para evitar más pérdidas humanas.

El Jueves Santo quedaron atrapados nueve mineros en un socavón del yacimiento Cabeza de Negro, en el distrito iqueño de Yauca del Rosario, quienes fueron rescatados sanos y salvos seis días después.