:quality(75)/cloudfront-us-east-1.images.arcpublishing.com/elcomercio/NNH4GHOBNJG2LPWXZFQNJUEBKQ.jpg)
La JIFE, el órgano de la ONU encargado de velar por el cumplimiento de los tratados internacionales sobre drogas, ha criticado a Perú por no ofrecer desde el 2017 cifras oficiales sobre la superficie cultivada de hoja de coca en su territorio.
“La falta de información actualizada dificulta evaluar a fondo las tendencias del cultivo de coca en la región andina”, señala la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE) en su informe anual difundido en Viena.
“La JIFE expresa su preocupación por el hecho de que en el 2018 y 2019 no se haya medido la superficie de cultivo ilícito de arbusto de coca en el Perú e insta a ese país a que termine y presente los estudios correspondientes a los años faltantes”, agrega el reporte.
Además, pide a Lima que renueve “su compromiso de larga duración con las actividades de monitoreo de cultivos y con la promoción de un desarrollo alternativo integral y sostenible” que ofrezca a los campesinos otros ingresos si deciden abandonar los cocales.
En el informe se señala que en la región andina las zonas de cultivo de coca han venido aumentando desde el 2016, lo que se traduce en un potencial incremento de las cantidades de cocaína producida.
La Junta y otros órganos de la ONU pudieron realizar hasta el 2017 análisis comparados de la situación y las posibles tendencias en cultivo de cocales y producción de cocaína en Bolivia, Perú y Colombia, subraya el informe.
Pero mientras que Colombia y Bolivia han seguido ofreciendo datos junto con la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (ONUDD), Perú no ha aportado nuevas cifras desde el 2017, lamenta la JIFE.
La última edición del monitoreo de cultivos de coca en Perú, con datos del 2017 y difundido en diciembre del 2018, y a cargo de la gubernamental Comisión Nacional para el Desarrollo y Vida sin Drogas (Devida) y la ONUDD, fijó una superficie de 49,900 hectáreas de coca, un 14% más que en el 2016.
Esa cifra no se ha vuelto a actualizar por parte de Perú argumentando que se está trabajando en una nueva metodología más precisa.
En el último año que se pudieron realizar análisis comparados, en el 2017, Perú era el segundo país por superficie de cultivos con un 20% del total mundial, por detrás de Colombia, con el 70%, y por delante de Bolivia, que tenía entonces el 10%.
