La empresa especializada en obras de metal-mecánica, IMELFE SAC rechazó los actos vandálicos ocurridos el pasado 12 de enero cuando un grupo de manifestantes ingresó a la mina de cobre Antapaccay en Espinar, Cusco, y quemó vehículos.
En un pronunciamiento, la compañía calificó el hecho como un “atentado delincuencial” tras la quema de dos unidades vehiculares que se encontraban al servicio de su personal que llegó hasta la mina Antapaccay para cumplir con los trabajos de mapeo de zonas a fin de instalar ¿puertas en los cercos perimétricos de la mina de cobre operada por Glencor.
“Las unidades vehiculares se encontraban estacionados en la playa de estacionamiento de la garita principal de las instalaciones de la minera. Los manifestantes vandálicos a las una de la tarde aproximadamente del día 12, tomaron por asalto el asentamiento minero Antapaccay, quemando en su totalidad las dos unidades vehiculares, las cuales evidenciamos mediante fotografías”, precisó.
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En esa línea, la empresa mencionó que las acciones violentas e intimidatorias son una demostración de la grave crisis y es una la amenaza principalmente al derecho de trabajo.
“Instamos al estado peruano y a las autoridades de la provincia de Espinar a asumir de manera urgente el diálogo con las organizaciones sociales de base; solo mediante un diálogo serio y de buena fe, se permitirá al país salir de esta grave crisis”, señaló.
“Es necesario rechazar de manera tajante los radicalismos y vandalismos que buscan sembrar caos e irrespetar a las instituciones democráticamente constituidas. Lamentamos las irreparables pérdidas de vidas humanas y hacemos un llamado para que todos nos unamos para sacar adelante a nuestra patria, en un ámbito de paz y armonía, pues los actos legítimos de protesta no pueden desbordar en vandalismo, daño a la propiedad privada y pública, ni afectar al derecho al libre tránsito”, agregó.
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El ataque
Un grupo de manifestantes ingresó este jueves 12 de enero al campamento minero Antapaccay, ubicado en la provincia de Espinar, en Cusco.
De acuerdo con un reporte preliminar del Ministerio de Energía y Minas (Minem), una camioneta y un minibus que se encontraban en el interior del centro minero fueron incendiadas, luego que una turba irrumpió en el lugar lanzando piedras al personal de seguridad.