Gerente VP de Consulting Solutions de Marsh Perú
Esta semana se conoció que Evergrande Group, el segundo grupo inmobiliario más grande de China afrontaría riesgo de quiebra. La colosal deuda de más de US$ 300,000 millones de la compañía ha generado una gran incertidumbre entre sus inversionistas a nivel mundial.
Sin embargo, la crisis no es reciente, sino que la situación para el gigante inmobiliario comenzó a agravarse desde agosto del año pasado debido a las modificaciones en el marco regulatorio y de supervisión del gobierno chino sobre la situación financiera principalmente en las empresas del sector inmobiliario debido a sus elevados niveles de apalancamiento.
Y es que, para las organizaciones, sobre todo para las que operan en más de un país, un tema constante de preocupación es el cambio del entorno regulatorio. Estos cambios pueden incluir factores como, por ejemplo: reformas tributarias, estándares ambientales, problemas de fuerza laboral y hasta la regulación por privacidad de datos.
De acuerdo con el Risk Resilience Report 2021, elaborado por Marsh, el 10% de los encuestados dicen que no están bien preparados para los riesgos regulatorios, mientras que el 73% dice que solo miden parcialmente los riesgos regulatorios o nada en absoluto. Ello indicaría que las organizaciones muestran una gran desconexión en la percepción de este tipo de riesgos.
El estudio, que recoge información de más de 1,000 organizaciones que se desarrollan en más de 30 industrias en 9 regiones a nivel mundial, señala que el 67% de los encuestados consideran que los clientes se ven afectados por los riesgos regulatorios. El caso de Evergrande es un ejemplo claro, dado que casi 1.5 millones de personas aún aguardan una vivienda que todavía no se ha construido por la compañía.
Otra área de negocio muy afectada por este tipo de riesgos es la de cadena de suministros, el 60% de los encuestados consideran que esta área es la segunda que más impacto sufriría en una compañía. Cabe destacar que la crisis de la inmobiliaria china no solo genera impactos en el país asiático, sino que podría afectar a países de América Latina y en especial a Perú.
Debido a un efecto dominó generado por el anuncio del posible quiebre de Evergrande, se ha visto afectado el precio del cobre, material del cual Perú es productor. Entre otras causas por el temor de los inversores ante un posible cierre de Evergrande, que requiere el mineral para la construcción de los inmuebles (utilizado para el cableado, tuberías de gas, sistemas térmicos, entre otros), afectando directamente a las cadenas de suministros.
Otro de los tipos de riesgos regulatorios, es el de los seguros que también es el de los menos considerados por las organizaciones. El Risk Reslience Report 2021 de Marsh, detalla que solo el 19% de las empresas consideran que tienen procesos eficaces para evaluar los requisitos de seguros basados en un entorno regulatorio en evolución.
Además de los clientes y la cadena de suministros, los riesgos regulatorios afectan al capital humano, al precio de los mercados, a las acciones, activos fijos y hasta la reputación de la organización. Por ello, es necesario contar con la capacidad de anticipar riesgos y una gestión integral de riesgos madura.