Editorial: De cerca, mejor

INVERSIÓN. Uno de los problemas más graves que tuvimos el año pasado y que terminó comprometiendo parte de nuestro crecimiento fue la inversión pública; particularmente a nivel regional y municipal. A pesar de los grandes esfuerzos del Gobierno nacional por implementar una política fiscal anticíclica como herramienta contra la desaceleración, la inversión pública creció 7% en el año (en comparación al 20% de los dos años anteriores), arrastrada principalmente por el retroceso de 7% de la inversión a nivel regional.

Debido a los escándalos de corrupción y a las prácticas poco transparentes de los gobiernos regionales, muchos de los proyectos de inversión a lo largo y ancho del país terminaron paralizados. A lo largo del 2014, 19 de los 26 presidentes regionales fueron objeto de investigaciones fiscales o estuvieron involucrados en procesos judiciales por más de 150 casos de corrupción diferentes. Cuatro de ellos terminaron detenidos por la justicia. Naturalmente, en un escenario así, no debe ser fácil encontrar empresas dispuestas a contratar con estos gobiernos.

Por ello mismo, el presidente Humala ha dado una elocuente manifestación cuando dice que prefiere que caiga un gobierno regional a un proyecto de inversión.Pero el Gobierno tiene una tarea adicional en el 2015 aparte de la de velar por la transparencia y la fiscalización. Por ser el primer año de muchas autoridades la mayoría necesita pasar por un periodo de acomodo al cargo la probabilidad de que se deje de ejecutar una parte del presupuesto es mayor (en el 2014 esta fracción fue 20%). Además, el presupuesto de este año para inversiones es S/. 201 millones (5.4%) menor al asignado el año pasado.

Ahora, debido a la tentación por gastar tampoco se debe descuidar la calidad del gasto, que ya viene siendo bastante pobre en el país (los ejemplos de esculturas ornamentales o recreacionales en lugares donde no existen ni siquiera servicios básicos abundan). Este año, el Gobierno tiene que estar más cerca que nunca de los gobiernos regionales y municipales; no para usurpar sus funciones, sino para capacitarlos y guiarlos.