FOTO 3 | 23 de marzo: En represalia por los aranceles sobre el acero y el aluminio, Pekín reveló una lista de 128 productos estadounidenses que quiere gravar con impuestos aduaneros entre 15% y 25% en caso de que fracasen las negociaciones con Washington. Entre ellos, figuran fruta fresca, carne de cerdo y aluminio reciclado: los productos estadounidenses involucrados representaban US$ 3,000 millones el año pasado.
FOTO 3 | 23 de marzo: En represalia por los aranceles sobre el acero y el aluminio, Pekín reveló una lista de 128 productos estadounidenses que quiere gravar con impuestos aduaneros entre 15% y 25% en caso de que fracasen las negociaciones con Washington. Entre ellos, figuran fruta fresca, carne de cerdo y aluminio reciclado: los productos estadounidenses involucrados representaban US$ 3,000 millones el año pasado.

La tensión subía hoy antes de la eventual entrada en vigor de los y el aluminio importados desde la Unión Europea, sobre los que los europeos prometieron respuesta.

La Unión Europea se puso de acuerdo en "responder en forma inteligente, decidida y unida" ante los eventuales aranceles, aseguró la canciller alemana Angela Merkel.

Los aranceles que amenaza con imponer a las importaciones de acero y aluminio "no respetan las reglas de la Organización Mundial de Comercio", señaló.

Canadá, México, Brasil o Argentina están en la misma situación. Estados Unidos había adoptado exenciones para esos países así como al bloque europeo hasta el 1 de junio.

El ministro de Finanzas francés, Bruno Le Maire, afirmó al recibir al secretario de Comercio estadounidense, Wilbur Ross, que Estados Unidos "debe saber que si toman decisiones agresivas contra Europa, Europa no se quedará sin reaccionar".

"Con nuestros socios alemanes, la comisaria de Comercio Cecilia Malmstrom, estamos determinados a tomar todas las medidas necesarias para responder a eventuales decisiones estadounidenses", advirtió, sin más precisiones.

Donald Trump debe confirmar si impone un arancel adicional de 25% al acero y 10% al aluminio europeo, una amenaza que planea desde marzo.

Según el diario Wall Street Journal, la administración Trump implementaría esta medida de protección aduanera a partir de este jueves, 24 horas antes del ultimátum fijado por Washington.

Aún es posible un acuerdo de último minuto, pero es poco probable, precisaron fuentes conocedoras del expediente.

Estados Unidos se negó en otorgar una exención permanente a estos nuevos aranceles.

"Si hay escalada, será porque la UE decidió responder", estimó Ross en una entrevista publicada el jueves por el diario francés Le Figaro.

Nerviosismo en el G7
La situación parece un diálogo de sordos, que podría continuar en la reunión de ministros de Finanzas del G7 a partir del jueves y hasta el sábado en Whistler, al norte de Vancouver (oeste de Canadá).

La reunión del grupo de los siete países más industrializados, Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y Gran Bretaña, se celebra en un contexto "tenso", concede una delegación.

Estados Unidos, que reprocha a los 28 miembros de la UE la falta de apertura de las fronteras a las mercaderías estadounidenses, importa el 51.3% del aluminio y el 35.8% del acero que consume desde sus socios del G7, según datos del departamento de Comercio estadounidense de 2017.

Frente a Estados Unidos, los europeos intentan mantenerse unidos. En Canadá tendrá quizás el apoyo de Japón, que ya está sujeto a los nuevos aranceles desde principios de marzo.

En el G7 Washington será interrogado por la fluctuación de su política comercial con China. Trump anunció el 19 de mayo una tregua con Pekín, pero luego volvió a la carga.

La Casa Blanca anunció que continuará con su plan de imponer aranceles de 25% a los 50,000 millones de dólares por año en importaciones chinas, y dijo preparar medidas para restringir inversiones chinas en Estados Unidos.

"China no quiere una guerra comercial pero no tiene miedo de tener una", advirtió el portavoz del ministerio de Relaciones Exteriores chino, Hua Chunying, denunciando "la voltereta" de su socio estadounidense.

Hoy Pekín anunció no obstante una reducción desde julio a los aranceles a la indumentaria, electrodomésticos o cosméticos.