China es el desafío “más trascendental” para la seguridad de Estados Unidos en las próximas décadas, mientras que Rusia representa una “amenaza aguda”, afirmó el Pentágono en su nueva estrategia de defensa publicada este jueves.
China “representa el desafío más trascendental y sistémico, mientras que Rusia plantea una amenaza aguda, tanto para los intereses nacionales vitales de Estados Unidos en el extranjero como en el territorio estadounidense”, precisa el ministerio de Defensa estadounidense en este documento que fija la estrategia del ejército para los próximos años.
“El desafío más profundo y grave para la seguridad nacional de Estados Unidos es el esfuerzo coercitivo y cada vez más agresivo (de China) para remodelar la región del Indo-Pacífico y el sistema internacional para adaptarlo a sus intereses y preferencias autoritarias”, señala esta nueva estrategia publicada por primera vez junto con la nueva estrategia nuclear de Estados Unidos.
Afirma que la retórica china contra Taiwán, cuya soberanía reclama y promete retomar por la fuerza si es necesario, es un factor “desestabilizador” que corre el riesgo de cometer un error de cálculo y amenaza la paz en la zona.
La nueva estrategia estadounidense “busca evitar el dominio de China en regiones clave al tiempo que protege el territorio estadounidense y fortalece un sistema internacional estable y abierto”, agrega el Pentágono, que especifica sin embargo que “un conflicto con China no es ni inevitable ni deseable”.
La amenaza “aguda” planteada por Moscú ha sido “demostrada más recientemente con la nueva invasión no provocada de Ucrania”, según el documento.
Enfatiza la necesidad de colaboración con países aliados para contrarrestar los peligros que plantean China y Rusia, y estima que esta cooperación es “fundamental para los intereses de seguridad nacional de Estados Unidos”.