El riesgo de impago de Rusia se disparó el miércoles a medida que los inversionistas comienzan a digerir la posibilidad de que la Administración Biden bloquee totalmente los pagos de bonos del país a los inversionistas estadounidenses a partir de la próxima semana.
La medida, de confirmarse, podría ser la gota que colma el vaso en la saga de la deuda rusa después de casi tres meses de guerra en Ucrania, empujando al país a su primer impago de deuda extranjera en un siglo.
Los seguros de la deuda soberana rusa, utilizados para proteger a los inversionistas contra un impago, se dispararon el miércoles, indicando una probabilidad de un 90% de default dentro de un año. El martes, la probabilidad era del 77%, según ICE Data Services.
El aumento del riesgo está relacionado con una decisión de la Oficina de Control de Activos Extranjeros del Departamento (OFAC, por sus siglas en inglés) del Tesoro, que se espera que permita que caduque una exención temporal una vez que expire el 25 de mayo, según personas familiarizadas con el asunto.
La exención, emitida poco después de que Estados Unidos impusiera sanciones a Rusia, ha dado a Moscú margen para pagar los cupones, y ponerle fin representaría un importante obstáculo para futuros pagos.
La negociación de los swaps de incumplimiento crediticio se disparó a principios de este año, ya que los inversionistas apostaban a que Rusia caería en default debido a que los pagos se realizarían en rublos y no en las monedas especificadas en los documentos de los bonos, o porque el dinero quedaba retenido en el sistema bancario.
Pero, hasta ahora, Rusia ha logrado cumplir con todas sus obligaciones de deuda, sorteando la maraña de sanciones que cerraron algunas vías. Eso incluye un escape de última hora a principios de este mes, cuando los pagos bloqueados finalmente fueron autorizados después de que Moscú recurriera a sus reservas nacionales de dólares.
Las empresas rusas no han sido tan afortunadas, con miles de millones de dólares de deuda que se encuentran en default técnico.
El ministro de Finanzas, Anton Siluanov, reiteró el miércoles que Rusia no tiene intención de incumplir los casi US$ 20,000 millones en deuda soberana que debe a inversionistas extranjeros, y que pagará en rublos si se bloquean las transferencias, según el servicio de noticias Tass.
En abril, Siluanov se comprometió a demandar si Rusia se veía obligada a incumplir sus obligaciones.
Los próximos pagos de deuda de Moscú vencen el 27 de mayo, sobre bonos extranjeros con vencimiento en el 2026 y 2036.
Los bonos al 2026 caían un 33% el miércoles a 16 centavos por dólar, según datos de CBBT compilados por Bloomberg. El bono se encuentra en su nivel más bajo desde mediados de marzo, cuando Rusia logró realizar el primer pago de la deuda externa desde la invasión a Ucrania gracias a la exención de la OFAC. El bono vence en el 2036 cambió poco.