El Reino Unido anunció nuevas sanciones contra dos oligarcas rusos que considera vinculados al Kremlin, el magnate de la minería y las telecomunicaciones Alisher Usmanov, y el ex vice primer ministro de Rusia Igor Shuvalov.
Con efecto inmediato, se congelan sus activos en territorio británico y se veta su entrada al país, informó en un comunicado el Ministerio de Exteriores, que estima que las fortunas de ambos suman en torno a US$ 19,000 millones (17,170 millones de euros).
El Ejecutivo ha impuesto hasta ahora castigos económicos a once oligarcas rusos, además de medidas contra el presidente del país, Vladímir Putin, y su ministro de Exteriores, Serguéi Lavrov, así como sobre diversos bancos y empresas, en respuesta a la invasión de Ucrania ordenada por Moscú.
“Nuestro objetivo es paralizar la economía rusa y hacer morir de hambre a la máquina de guerra de Putin”, dijo la jefa del Foreign Office, Liz Truss.
“Sancionar a Usmanov y Shuvalov envía el claro mensaje de que vamos a atacar a los oligarcas y personas estrechamente relacionadas con el régimen de Putin”, agregó.
Usmanov controla el conglomerado internacional USM, con intereses en la metalurgia, la minería, las telecomunicaciones y la tecnología, y es uno de los propietarios del operador de telefonía ruso MegaFon.
El oligarca ha mantenido una estrecha relación con los clubes de fútbol ingleses Arsenal y Everton. Este último equipo anunció ayer la extinción de todas las relaciones comerciales con sus empresas a raíz de los “espantosos acontecimientos que están ocurriendo en Ucrania”.
Según el Foreign Office, Usmanov posee el palacete de Beechwood House, en el norte de Londres, valorado en 48 millones de libras (58 millones de euros), así como la finca palaciega del siglo XVI Sutton Place, en el condado inglés de Surrey.
Horas antes del anuncio de las nuevas sanciones británicas, Alemania había inmovilizado el yate de Usmanov “Dilbar”, una de las mayores embarcaciones privadas del mundo, con 156 metros de eslora.
En cuanto a Shuvalov, el vice primer ministro ruso entre el 2008 y 2018 es propietario de dos apartamentos en el centro de Londres valorados en 11 millones de libras (13 millones de euros), según señaló Exteriores.
Las medidas anunciadas este jueves por el Gobierno incluyen el veto a cualquier ciudadano y empresa británica a hacer negocios con los oligarcas sancionados.
Londres anunció al mismo tiempo que planea activar un grupo de trabajo con miembros de los ministerios de Interior, Economía, Empresas y otros departamentos para coordinar futuras medidas contra intereses rusos.