El presidente de Rusia, Vladímir Putin, firmó la ley que establece la creación de un movimiento social y patriótico nacional para niños y jóvenes, con el fin de consolidar la sociedad rusa en momentos en que Rusia continua con su invasión a Ucrania y se enfrenta a su mayor crisis con Occidente en las últimas décadas.
En virtud de la ley, en el movimiento podrán participar menores de edad que estudien en los niveles primario, medio o superior, así como otras personas establecidas en los estatutos.
El nombre del movimiento aún está por definir y será elegido por sus futuros miembros.
La participación de los jóvenes y niños en este movimiento, que sería parecido a las organizaciones juveniles y pioneriles de la Unión Soviética, será voluntaria.
Esta organización “participará en la educación, orientación profesional, organización del esparcimiento de la nueva generación, la formación de los puntos de vista y en la preparación de los jóvenes para su vida plena en la sociedad”.
Los consejos regionales de desarrollo del movimiento serán encabezados personalmente por los gobernadores.
La organización propondrá al presidente ruso encabezar el comité patrocinador del movimiento.
Los autores del proyecto de ley argumentaron que este movimiento “permitirá crear una política unificada de la educación de niños y jóvenes en los centros educativos, sistematizar el trabajo de todas las organizaciones, comunidades y clubes infantiles, amplificar sus resultados, consolidar e intensificar el apoyo a los menores”.