Naciones Unidas reclamó a los países ricos que avancen en la aportación de US$ 100,000 millones comprometida para garantizar el desarrollo sostenible y advirtió que el cambio climático lleva al mundo a “una carretera hacia el infierno”.
“Estamos esperando los US$ 100,000 millones prometidos por los países ricos, necesitamos esos US$ 100,000 millones”, reclamó el enviado especial de los Océanos de la ONU, Peter Thomson, este viernes en la conferencia de Lisboa, en alusión al acuerdo alcanzando en la COP26 de Glasgow del 2021.
“En este momento, estamos en una carretera hacia el infierno, es el camino en el que nos encontramos”, alertó Thomson.
Necesitan “billones de dólares” porque quieren energía renovable en alta mar, inversión en acuicultura sostenible y una infraestructura de sistema de saneamiento que eviten contaminación de las lagunas, precisó.
“La revolución industrial del norte provocó este problema global”, agregó, “es necesario repartir la riqueza y hacer lo que es correcto”.
“Es imposible” revertir la situación sin financiación, reiteró el enviado de la ONU, que no escatimó críticas contra la industria petrolera.
La industria petrolera recibe como US$ 2 billones o US$ 3 billones anuales “para continuar haciendo lo que hacen”, dijo, y concretó que el futuro que quieren es: “Llevarnos por esa carretera al infierno”.
“Si se usa la mitad de ese monto para invertir en infraestructuras con las que generar energía mareomotriz se podría cubrir el 10% de la demanda energética en Europa y el 90% restante podría provenir de la energía eólica offshore”, afirmó.
“Las personas hablan de centenas de millares de millones como si fuera difícil, pero nosotros tenemos que gastar billones para mantener a nuestros jóvenes y nietos vivos”, insistió Thomson, ya que el futuro con tres grados más de temperatura media global “es un mundo de plagas, fuego y calor”.
Financiación para los corales
El enviado de la ONU saludó compromisos alcanzados durante esta conferencia para proteger los corales, que conservan el 25% de la vida oceánica y el 90% de ellos podría desaparecer para el 2050 si no se toman medidas.
“No podemos tener un océano saludable sin ese 25% de biodiversidad que vamos a perder”, defendió.
Chuck Cooper, presidente Fondos Globales para los Arrecifes de Coral (GFCR, por sus siglas en inglés), anunció una contribución conjunta de Bloomberg Filantrophy y Builders Vision por US$ 18 millones para proteger los corales.
La GFCR, que tiene acuerdos con once países, avanzará en contactos con otros 14 para desarrollar planes de conservación de los arrecifes de coral hasta el 2023.
La II Conferencia de los Océanos de la ONU concluye este viernes con un documento no vinculante respaldado por las delegaciones participantes en representación de unos 150 países.
A partir de ahora, a atención está puesta en agosto, cuando está prevista la negociación de un acuerdo vinculante sobre la protección de los océanos en el seno de Naciones Unidas.