Muchas escuelas de Estados Unidos que normalmente darían el lunes la bienvenida a los estudiantes en sus aulas están retrasando sus fechas de ingreso, luchando para evaluar a alumnos y maestros y preparándose, como último recurso, para regresar al aprendizaje remoto, debido a la cifra récord de casos de la variante ómicron del coronavirus en el país.
En Washington, D.C., todo el personal y 51,000 estudiantes de escuelas públicas deben cargar un resultado negativo de la prueba para detectar el COVID-19 en el sitio web del distrito antes de asistir a clases el miércoles. No se aceptarán pruebas tomadas antes del martes. Los padres pueden tomar las pruebas rápidas en su escuela o usar las suyas propias.
Se están realizando esfuerzos similares en California, que se comprometió a proporcionar kits de prueba caseros gratuitos a sus 6 millones de estudiantes de escuelas públicas desde kindergarten a secundarias.
“Hay mucho COVID por ahí (...) va a ser un comienzo difícil”, dijo Michelle Smith McDonald, directora de comunicaciones y asuntos públicos de la Oficina de Educación del Condado de Alameda.
Los nuevos casos de COVID-19 han tocado niveles récord de 400,000 infecciones al día en promedio debido a la naturaleza extremadamente transmisible de la variante ómicron.
Los expertos en salud predicen que incluso más personas darán positivo después de las reuniones por las fiestas de fin de año, lo que llevará a millones de personas a la cuarentena y al aislamiento en las próximas semanas.
Las escuelas desde Massachusetts hasta Michigan y el estado de Washington retrasaron las clases unos días y pidieron a los estudiantes y al personal que usaran ese tiempo para hacerse la prueba de COVID-19.
El gobernador de California, Gavin Newsom, ha dicho que cerrar las escuelas en el estado debería ser solo un último recurso. Pero los administradores escolares están preocupados por tener suficientes maestros y personal.
“Probablemente habrá cierres de escuelas individuales, ya sea debido a un brote o por falta de personal”, dijo McDonald.
De acuerdo con la guía actualizada de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), el estado ha acortado su período de cuarentena para aquellos expuestos a alguien con COVID o dando positivo por COVID a cinco días desde 10.
Científicos y expertos en salud están preocupados porque la política no distingue entre personas vacunadas y no vacunadas, que se recuperan del virus a diferentes velocidades. Tampoco requiere pruebas para confirmar que una persona ya no es infecciosa antes de que finalice su cuarentena.
California ha recomendado que las personas tengan una prueba COVID negativa antes de salir del aislamiento.
Otros estados como Illinois https://twitter.com/ISBEnews no han adoptado las nuevas directrices de los CDC.