La flamante ministra de Economía de Argentina, Silvina Batakis, ratificó su compromiso de cumplir el acuerdo alcanzado entre el gobierno argentino y el Fondo Monetario Internacional (FMI) para refinanciar un préstamo de más de US$ 40,000 millones, aunque no descartó que haya cambios en el programa económico pautado con el organismo multilateral.
“Ese acuerdo, como argentinos, hemos decidido acordarlo y tenemos que cumplirlo, ir viendo las metas, y en cada revisión de esas metas trimestrales seguramente también habrá algunas modificaciones, porque el mundo está cambiando más que nunca por el tema de la guerra (en Ucrania)”, declaró a Radio El Destape.
La nueva titular de Economía, quien asumió el cargo este lunes tras la dimisión de su predecesor, Martín Guzmán, el sábado pasado, aseguró que las metas del segundo trimestre “efectivamente” se cumplieron, algo que será más difícil de lograr en las dos próximas revisiones.
“El segundo semestre es un semestre muy complejo para la economía argentina, porque hay muchos vencimientos en pesos, hay un vencimiento muy fuerte en septiembre y también a fines de julio, entonces eso, obviamente, va a generar tensiones”, reconoció la ministra.
“Tenemos que ser realistas y honestos. Las tensiones van a existir, pero tenemos que trabajar en forma conjunta con este programa económico y tratando de que ese programa vaya teniendo los ajustes necesarios para que la población empiece a poder mejorar todas sus condiciones de vida”, agregó.
Batakis, una economista de perfil heterodoxo, prestó juramento este lunes como ministra de Economía, en medio de tensiones en los mercados financieros y una creciente división en la coalición oficialista.
Tras su nombramiento, fuentes del FMI consultadas por Efe manifestaron su disposición de trabajar con la ministra para “seguir ayudando” al país suramericano.
“Esperamos trabajar con la ministra Silvina Batakis y su equipo para continuar apoyando a la Argentina y su gente a fortalecer la estabilidad macroeconómica y abordar sus profundos desafíos para sentar las bases de un crecimiento más sostenible e inclusivo”, dijo a Efe una portavoz del FMI, que también deseó a Martín Guzmán “todo el éxito en sus futuros emprendimientos”.
Según lo pactado con el FMI, el país debe reducir este año su déficit fiscal primario a 2.5% del Producto Bruto Interno (PBI) -desde el 3% en el 2021- y la asistencia monetaria por parte del Banco Central al Tesoro a 1% del PBI -desde el 3.7% en el 2021-.
Además, debe sumar US$ 5,800 millones a las reservas del Banco Central, en un escenario de escasez de divisas.
La economía argentina logró crecer el año pasado 10.3% tras tres años de severa recesión, pero este año la actividad ha perdido vigor, mientras que la elevada inflación, uno de los principales problemas macroeconómicos del país, se ha acelerado como consecuencia de la invasión rusa a Ucrania.