Los líderes occidentales intensificaron el martes los preparativos para cualquier acción militar rusa en Ucrania, con Estados Unidos centrándose en cómo proteger los suministros de energía y Gran Bretaña instando a otros países europeos a preparar sanciones económicas.
La tirantez se mantenía después de que la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) anunció el lunes que estaba poniendo fuerzas en espera y reforzando el este de Europa con más barcos y aviones de combate en respuesta a la acumulación de tropas rusas cerca de la frontera con Ucrania.
Rusia, que niega estar planeando un ataque, dijo que observaba la situación con “gran preocupación”. El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, insistió en que la crisis se debe a las acciones de Estados Unidos y la OTAN, y no al aumento de las tropas rusas.
Estados Unidos y la Unión Europea (UE) han amenazado con sanciones económicas si Rusia lanza una invasión y los líderes occidentales dicen que la unidad es primordial, pero han aparecido grietas entre los países europeos sobre la mejor manera de responder.
“Es absolutamente vital que Occidente esté unido ahora, porque es nuestra unidad la que será mucho más eficaz para disuadir cualquier agresión rusa”, dijo el primer ministro británico, Boris Johnson, en el Parlamento, instando a “nuestros amigos europeos” a estar preparados para desplegar sanciones en cuanto se produzca cualquier incursión.
Johnson dijo que Gran Bretaña está discutiendo con Estados Unidos la posibilidad de prohibir a Rusia el acceso al sistema global de pagos Swift, una de las muchas posibles medidas para castigar a Moscú si lanza una ofensiva.
En Washington, funcionarios de alto rango del Gobierno del presidente Joe Biden dijeron que Estados Unidos estaba en conversaciones con los principales países productores de energía y empresas de todo el mundo para un posible desvío de suministros a Europa si Rusia invade Ucrania.
En declaraciones a periodistas, los funcionarios no mencionaron países o empresas que participan en las conversaciones para proteger el abastecimiento, pero dijeron que incluían una amplia gama de proveedores, como vendedores de gas natural licuado (GNL).
“Hemos estado trabajando para identificar volúmenes adicionales de gas natural no ruso de varias zonas del mundo; desde el norte de África y Oriente Medio hasta Asia y Estados Unidos”, afirmó un funcionario bajo condición de anonimato.
“En consecuencia, estamos en conversaciones con los principales productores de gas natural de todo el mundo para entender su capacidad y voluntad de aumentar temporalmente la producción de gas natural y asignar estos volúmenes a los compradores europeos”.
La UE depende de Rusia para alrededor de un tercio de su suministro de gas. Cualquier interrupción agravaría una crisis energética ya existente causada por la escasez.
“Para garantizar que Europa pueda pasar el invierno y la primavera, esperamos estar preparados para asegurar suministros alternativos que cubran una mayoría significativa del posible déficit”, agregó el funcionario.
Ayuda militar
Rusia tiene decenas de miles de soldados cerca de Ucrania y exige a Occidente garantías de seguridad, incluida la promesa de la OTAN de no admitir nunca a Ucrania. Moscú considera a la antigua república soviética como un espacio de amortiguación entre Rusia y los países de la OTAN.
La tensión sobre Ucrania se ha dejado sentir en los mercados financieros y en el precio del petróleo en los últimos días.
Una escalada del conflicto entre Rusia y Ucrania probablemente aumentaría aún más los costos de la energía para muchos países, manteniendo elevadas las tasas de inflación general durante más tiempo, señaló Gita Gopinath, primera subdirectora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI).
Estados Unidos ha comprometido más de US$ 650 millones en ayuda de seguridad a Ucrania en el último año y más de US$ 2,700 millones desde el 2014, cuando Rusia se anexionó la península ucraniana de Crimea.
Un avión estadounidense con equipo militar y municiones aterrizó en Kiev el martes, el tercer envío de un paquete de seguridad de US$ 200 millones para apuntalar a Ucrania.
El Departamento de Defensa de Estados Unidos dijo el lunes que unos 8,500 soldados estadounidenses habían sido puestos en alerta máxima y estaban esperando órdenes para desplegarse en la región, en caso de que Rusia invada Ucrania.
Hasta ahora, la OTAN cuenta con unos 4,000 soldados en batallones multinacionales en Estonia, Lituania, Letonia y Polonia, respaldados por tanques, defensas aéreas y unidades de inteligencia y vigilancia.
Funcionarios estadounidenses dijeron el lunes que el Pentágono estaba ultimando los esfuerzos para identificar las unidades específicas que podría desplegar en el flanco oriental de la OTAN.