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Con casi tres millones de solicitudes en línea se inició este jueves en Chile el proceso para acceder al segundo retiro parcial de fondos de pensiones privados, aprobado por el Congreso para paliar la crisis económica generada por la pandemia.
Hasta el mediodía, las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP) registraban “un total de 2′793,101 solicitudes ingresadas de manera exitosa”, un millón más que en la primera jornada del primer retiro hace cuatro meses, explicó Fernando Larraín, gerente general de las AFP, en un balance preliminar.
Esto refleja “el alto interés de los afiliados por retirar parte de sus ahorros provisionales y que el trámite digital está funcionando de buena manera”, según agregó Larraín.
Largas filas podían también observarse en las afueras de las oficinas de las Administradoras, hasta donde concurrieron sobre todo trabajadores extranjeros y personas que afirman no saber cómo hacer el trámite por internet.
El Congreso chileno aprobó hace una semana este nuevo adelanto de hasta un 10% de los fondos de pensiones tras una petición de legisladores opositores, al agotarse las ayudas fiscales para enfrentar la crisis económica derivada del coronavirus.
El anterior, aprobado en julio, fue cobrado por casi 10 millones de afiliados a las AFP, que en conjunto retiraron unos US$ 18,000 millones.
La inyección de liquidez derivada de esa operación impulsó fuertemente el consumo privado.
El impacto del segundo retiro “será menor que el primero”, debido a que “la caída de ingreso provocada por la pandemia ya habría sido más que compensada por las medidas previas, y porque los recursos que podrían retirarse se concentran en los quintiles de ingresos más altos, que tienen menos incentivos o menos necesidad de utilizarlos para consumo”, explicó Mario Marcel, presidente del Banco Central, al presentar el último Informe de Política Monetaria del año.
Según cálculos del gobierno, con este nuevo retiro cerca de 4.2 millones de afiliados a las AFP -casi un tercio del total- quedarán con sus cuentas de ahorro en cero.
Tal como la vez anterior, el máximo retiro es de unos US$ 5,600. La ley establece que la mitad del monto debe ser depositado en plazo de 10 días hábiles desde que se hizo la solicitud, y la otra mitad en los siguientes 10 días.
Pero a diferencia del primero, esta vez se establece la obligatoriedad de pagar impuestos por el monto sacado a los trabajadores que ganen más de US$ 2,000 mensuales.