El Gobierno brasileño le otorgó este jueves a tres grupos privados la gestión de 15 aeropuertos, incluyendo el de Congonhas, el segundo en movimiento del país y que se lo adjudicó la española Aena, con lo que las concesionarias ya controlan el 92% del tráfico aéreo del país.
El gran vencedor en la séptima subasta de concesiones realizada por la Agencia Nacional de Aviación Civil (ANAC) fue Aena, que se adjudicó la gestión de 11 aeropuertos, entre los cuales Congonhas, el segundo de mayor movimiento en el país con unos 22,8 millones de pasajeros al año de promedio hasta antes de la pandemia.
Aena se comprometió a pagar un total de US$ 1,603 millones, de los cuales US$ 471 millones corresponden al coste de la licencia de operación por 30 años y los US$ 1,132 millones restantes, en compromisos de inversiones.
Los otros dos vencedores fueron dos grupos brasileños, XP Inversiones, que se adjudicó dos pequeños aeropuertos en Sao Paulo y Río de Janeiro, y Novo Norte, que adquirió las concesiones de dos terminales de capitales amazónicas, Belén y Macapá.
Un “éxito” en coyuntura negativa
Pese a que tan solo cuatro grupos presentaron ofertas, el Gobierno consideró la subasta un “gran éxito” dada la coyuntura económica negativa.
Ello debido a que los vencedores de la subasta pagaron 2,716.4 millones de reales (unos US$ 522,4 millones) por las licencias, casi tres veces el valor mínimo exigido por el Gobierno (938 millones de reales o US$ 180 millones).
Los vencedores, además, se comprometieron a realizar inversiones por 7,300 millones de reales (unos US$ 1,403.8 millones) en la modernización y ampliación de las terminales.
Los 15 aeropuertos concedidos mueven cerca de 30 millones de pasajeros al año (antes de la pandemia), es decir el 16% del tráfico aéreo del país, con lo que el porcentaje que ya está en manos de operadores privados saltó al 92%.
Aena amplía su presencia
Aena, única empresa en presentar propuesta por el mayor bloque, ofreció 2,450 millones de reales (unos US$ 471 millones) por las licencias, un valor en un 231% superior al mínimo exigido por el Gobierno (740,1 millones de reales o US$ 142 millones).
El gestor aeroportuario español, que ya opera seis terminales en Brasil, también se comprometió a realizar inversiones en los 11 aeropuertos por 5,889 millones de reales (unos US$ 1,132 millones).
Además de Congonhas, considerada la “joya de la corona” de la subasta, Aena también se adjudicó los aeropuertos de Campo Grande, Corumbá y Ponta Pora, ubicados en el estado de Mato Grosso do Sul; Santarém, Marabá, Parauapebas y Altamira, en el estado de Pará, y Uberlandia, Uberaba y Montes Claros, en el estado de Minas Gerais.
Los once aeropuertos asumidos por Aena registraron en el 2019 un total de 26,8 millones de pasajeros, el 12% del tráfico aéreo de Brasil.
La privatización llega al 92 %
Como operadora ahora de 17 aeropuertos, Aena se ubica como una de las principales gestoras de terminales aéreos en el país, superando en tránsito incluso al grupo brasileño CCR, que el año pasado se adjudicó 16 aeropuertos en otra subasta de concesiones.
Desde el 2011, cuando comenzó a ofrecer sus aeropuertos en concesión a la iniciativa privada, Brasil otorgó la gestión de 44 terminales, incluyendo el de Guarulhos (Sao Paulo), el mayor del país, y los internacionales de Belo Horizonte, Brasilia, Recife y Salvador.
Esos aeropuertos eran responsables por el 76% del tráfico de pasajeros en Brasil, con lo que, tras la nueva subasta, las concesionarias privadas pasarán a responder por el 92% del movimiento aéreo brasileño.
Ese porcentaje debe acercarse a casi el 100% el próximo año, para cuando el Gobierno prevé ofrecer en concesión los dos principales aeropuertos de Río de Janeiro: el internacional Antonio Carlos Jobim -que ya había sido otorgado pero su concesionario lo devolvió- y el Santos Dumond, usado para los vuelos nacionales.