A pesar de sus promesas medioambientales, el Reino Unido va por detrás de otros países europeos en la electrificación de su red ferroviaria, que sigue funcionando en gran medida con diésel altamente contaminante.
Datos del gobierno indican que 29% de la flota de trenes del Reino Unido utilizan diésel, mientras que los de carga dependen 90% de ese combustible fósil.
Una nueva estrategia gubernamental presentada el jueves incluye planes de electrificar otros 288 km de vías férreas.
Esto ayudaría a “alcanzar la meta de eliminar todos los trenes a diésel de la red para el 2040″, anunció el departamento de Transporte.
Dependencia del diésel
Solo 42% de la malla ferroviaria británica está electrificada actualmente, según datos oficiales.
Los trenes eléctricos emiten 60% menos carbono que los aparatos a diésel, según el Rail Delivery Group.
El empresarial Rail Freight Group (RFG) reveló en octubre que algunos operadores de tren eléctrico debieron volver a usar locomotoras a diésel debido a un aumento en el precio de la electricidad.
Los precios de bienes y servicios han crecido en todo el mundo por la reapertura de las economías tras los cierres por la pandemia.
El RFG dijo que la reversión a diésel era “lamentable” pero aseguró que es algo temporal.
Su directora general, Maggie Simpson, destacó la necesidad de “más tendido eléctrico para apoyar la inversión en nuevas locomotoras”.
“Claro que en el largo plazo necesitamos avanzar a una economía descarbonizada, así que un mayor uso de energía eléctrica será una gran parte de eso”, indicó Simpson.
El mes pasado, Reino Unido lanzó un tren de pasajeros totalmente eléctrico entre Londres y Edimburgo, y la locomotora no lleva motores de apoyo a diésel.
Algunos operadores de tren aprovechan la oportunidad para hacer la transición mediante modelos híbridos, como lo han hecho los fabricantes de automóviles.
Chiltern Railways, que opera servicios de pasajeros entre Londres y el centro de Inglaterra, recientemente anunció una inversión en un tren híbrido eléctrico-diésel desarrollado por las empresas Porterbrook y Rolls-Royce, fabricante de motores de avión.
Futuro de hidrógeno
Pero además de aumentar la electrificación de sus ferrocarriles, Reino Unido está también en la fase inicial de fabricar trenes que utilizan hidrógeno, una fuente renovable de energía.
El fabricante francés de trenes Alstom anunció planes de entregar a Reino Unido su primera flota de trenes a hidrógeno.
“Los trenes ya son la modalidad de transporte más bajo en emisiones, pero podemos hacer más”, declaró Nick Crossfield, director de Alstom para Reino Unido e Irlanda, al presentar el proyecto de hidrógeno en asociación con la británica Eversholt Rail.
La cumbre de COP26 en noviembre en Glasgow, exhibió el tren a hidrógeno.
HydroFLEX, desarrollado por Porterbrook y la Universidad de Birmingham con financiamiento del gobierno británico, es un tren remodelado cuyos diseñadores aseguran que puede llevar suficiente hidrógeno para alcanzar el mismo rendimiento de un motor a diésel.
La estación central de Glasgow exhibió el tren HydroFLEX al público en momentos que la cumbre COP26, a poca distancia, se centraba en eliminar la venta de vehículos que utilizan combustibles fósiles.