Las autoridades francesas han anunciado que los niños a partir de los 6 años deberán llevas mascarillas en lugares públicos desde el lunes, en una extensión del margen de edad que se situaba hasta ahora en los 11 años.
La norma será aplicable en el transporte público, establecimientos abiertos al público, complejos deportivos, lugares de culto y exteriores, según la normativa publicada este sábado en el boletín oficial del Estado francés.
La decisión tiene lugar antes del inicio de las clases y en un momento en que la variante ómicron ha disparado contagios en el país hasta récord de los 232,200 contagios registrados al 31 de diciembre.
Asimismo y también a partir del lunes 3 de enero, el protocolo de salud cambiará en la escuela: si un estudiante da positivo, se solicitarán dos pruebas a sus compañeros (en lugar de una) para regresar.
“El acceso a la educación es un derecho fundamental de los niños y las vacunación contra el coronavirus no será condición para ir a la escuela”, especifica el Ministerio de Salud en la nota recogida por ‘Le Figaro’.
El Gobierno de Francia anunció el pasado lunes una batería de nuevas medidas para hacer frente al recrudecimiento de la situación de la pandemia, entre las que destaca la imposición del teletrabajo entre tres y cuatro días a la semana durante las próximas tres semanas.