Son buques que operan al margen de la autoridad china, no tienen matricula, bandera ni licencia de pesca y que integran las llamadas "flotas oscuras", explica la investigación, realizada por el Observatorio de Pesca Global. (Foto: iStock)
Son buques que operan al margen de la autoridad china, no tienen matricula, bandera ni licencia de pesca y que integran las llamadas "flotas oscuras", explica la investigación, realizada por el Observatorio de Pesca Global. (Foto: iStock)

Un ambicioso estudio ha revelado la copiosa sobrepesca ilegal de flotas chinas en aguas de Corea del Norte, actividad que viola sanciones, tiene un gran coste ecológico y aboca a los norcoreanos a emprender misiones suicidas para fae-nar, contó uno de sus autores.

El estudio, publicado esta semana en la revista Science Advan-ces, establece que en el 2017 más de 900 embarcaciones de origen chino pescaron ilegalmente en aguas de la costa oriental norcoreana y que más de 700 lo hicieron también al año siguiente.

Son buques que operan al margen de la autoridad china, no tienen matricula, bandera ni licencia de pesca y que integran las llamadas “flotas oscuras”, explica la investigación, realizada por el Observatorio de Pesca Global (GFW por sus siglas en in-glés), ONG fundada para monitorizar el impacto de la alrededor del mundo.

Tecnologías satelitales

"El estudio empleó cuatro tecnologías satelitales distintas para sacar a la luz las 'flotas oscuras'; embarcaciones que no difunden públicamente su ubicación y no aparecen en sistemas públicos de seguimiento", explicó por correo electrónico Park Jae-yoon, científico de datos de GFW y uno de los autores de la investigación.

El análisis se centra básicamente en torno al Mar de Japón (llamado Mar del Este en el las dos Coreas), aguas situadas entre Rusia, ambas Coreas y Japón "donde las tensiones geopolí-ticas y las fronteras disputadas crean un vacío en cuanto a datos compartidos y gestión", explica el texto.

La combinación de sistemas de observación por satélite con sis-temas de big data y aprendizaje automático nunca se ha usado para revelar la actividad de flotas enteras, por lo que Park cree que el estudio “marca el inicio de una nueva era para el seguimiento por satélite de la industria pesquera”.

Visión nocturna

Entre las tecnologías empleadas destaca, por ejemplo, la usada para identificar barcos de noche, "conocida como Radiómetro de Imágenes en el Infrarrojo Visible (VIIRS), que recoge la pre-sencia de buques pesqueros que utilizan luces para atraer a los calamares a la superficie por la noche o realizar otras opera-ciones nocturnas", añade Park.

El calamar volador japonés (Todarodes pacificus) es el principal objetivo de estas "flotas oscuras" - cuya presencia en la zona ha aumentado paulatinamente desde el 2004 - y una especie cuyo valor resulta crítico para las dos Coreas y Japón.

Estas flotas, según el estudio, parecen tener un importante impacto medioambiental y plantean "un desafío sustancial para la gestión de poblaciones", tal y como demuestra la importante reducción en las capturas de este cefalópodo en Corea del Sur y Japón, donde han caído 80% y 82% desde el 2003.

Este calamar es uno de los cinco productos del mar más consumi-dos en territorio nipón y el producto más rentable para la in-dustria pesquera surcoreana, además de haber supuesto la terce-ra mayor exportación para Corea del Norte hasta que en setiem-bre el 2017 la ONU impuso un paquete severo de sanciones en castigo por sus pruebas de armas.

Estas sanciones prohíben, entre muchas otras cosas, a Corea del Norte vender o transferir derechos de pesca en sus aguas por lo que la presencia de estas "flotas oscuras" vendría a suponer una violación de esta resolución de Naciones Unidas por parte de Pekín y de Pionyang.

El drama de los “barcos fantasma”

A su vez, el estudio arroja luz sobre el drama de los llamados "barcos fantasma" norcoreanos, que llegan cada año hasta las costas de Japón sin tripulantes o con varios cadáveres de pescadores a bordo.

"La competencia de los arrastreros industriales originarios de China probablemente está desplazando a los pescadores norcorea-nos, empujándolos a aguas vecinas rusas y los barcos de madera, más pequeños, de los norcoreanos están mal equipados para este viaje de larga distancia", explica Park.

La investigación muestra que en el 2018 unos 3,000 barcos nor-coreanos pescaron ilegalmente en aguas rusas, donde el menor fallo mecánico puede dejar estos navíos a merced de la corrien-te, la cual los acaba arrastrando hasta las costas del Lejano Oriente ruso y, principalmente, al archipiélago japonés, donde cada año arriban decenas de "barcos fantasma".

“Estos incidentes a menudo implican hambre y muerte, y muchos pueblos de pescadores en la costa este de Corea del Norte están siendo ahora apodados como ‘aldeas de viudas’”, concluye Park.