La alta inflación, la volatilidad en los mercados de valores y materias primas y la guerra en Ucrania han surgido como los principales riesgos para el sistema financiero de Estados Unidos, informó la Reserva Federal (Fed) en una actualización bianual sobre estabilidad financiera.
La rápida subida de los rendimientos del Tesoro estadounidense, los problemas relacionados con la guerra en los mercados del petróleo y otros factores ya han puesto a prueba algunas partes del sistema financiero, advirtió el informe, y aunque la tensión “no ha sido tan extrema como en episodios anteriores, el riesgo de un deterioro significativo y repentino parece más alto de lo normal”.
“Cabe destacar que los hogares y las empresas han disminuido su endeudamiento como porcentaje del producto interior bruto, y actualmente parecen disponer de recursos para cubrir la carga de la deuda, lo que constituye un aspecto importante de la resistencia en un entorno de subida de las tasas de interés”, dijo la gobernadora de la Fed y vicepresidenta designada, Lael Brainard, en un comunicado que acompañó al informe.
El informe es el primero que hace un balance de los rápidos cambios en el panorama financiero que han tenido lugar desde el pasado otoño boreal, incluyendo un endurecimiento más rápido de la política monetaria por parte de la Fed y la subida de las tasas de interés en general, una inflación que ha amenazado con hacerse más persistente y la invasión rusa de Ucrania.
La volatilidad se ha manifestado en los mercados de valores de Estados Unidos, que han caído bruscamente en las últimas semanas, así como en los mercados de bonos, que se han ajustado a la subida de las tasas de interés en Estados Unidos y al endurecimiento de las condiciones financieras como parte de los esfuerzos de la Fed por frenar la inflación.
“La inflación ha sido mayor y más persistente de lo esperado, incluso antes de la invasión de Ucrania, y la incertidumbre sobre las perspectivas de inflación plantea riesgos para las condiciones financieras y la actividad económica”, señaló el informe.
“Los mercados financieros experimentaron una gran volatilidad y algunas tensiones de la liquidez” durante los últimos seis meses, según el informe.
“En términos netos, durante el periodo, los rendimientos del Tesoro aumentaron notablemente, los precios de las acciones en general disminuyeron notablemente y los diferenciales de crédito se ampliaron considerablemente en los mercados de bonos corporativos”.
En una encuesta realizada a economistas y agentes del mercado sobre los principales riesgos a los que se enfrenta el sistema financiero estadounidense, las amenazas de la pandemia se han desvanecido y han sido sustituidas por un entorno geopolítico repentinamente incierto.