Las cuestiones de Taiwán y Ucrania son diferentes, ya que Taiwán siempre ha sido parte de China, declaró el ministro de Asuntos Exteriores chino, Wang Yi, quien dijo que tratar de equiparar las situaciones es actuar con un “doble rasero”.
China reclama la isla, gobernada democráticamente, como territorio propio y en los últimos dos años ha aumentado la presión militar contra Taiwán, sin renunciar nunca al uso de la fuerza para someterla al control de Pekín.
Los Gobiernos de China y Taiwán coinciden en que las situaciones de Taiwán y Ucrania son diferentes, aunque por motivos distintos.
China dice que Taiwán nunca ha sido un país independiente, mientras que la isla dice que es importante geopolíticamente y que, a diferencia de Ucrania y Rusia, no comparte ninguna frontera terrestre con China.
Yi dijo que las cuestiones de Taiwán y Ucrania “no son en absoluto comparables”, ya que la situación en Taiwán es un asunto interno de China y la de Ucrania es una disputa entre dos países.
“Hemos visto que algunas personas hacen hincapié en el principio de soberanía en la cuestión de Ucrania. Sin embargo, siguen socavando la soberanía y la integridad territorial de China en la cuestión de Taiwán. Esto es un doble rasero”, sostuvo en aparente referencia a Estados Unidos.
Washington es el principal patrocinador internacional y proveedor de armas de Taiwán, una fuente frecuente de fricciones en los vínculos entre China y Estados Unidos.
Pekín no reconoce ninguna reclamación de soberanía por parte del Gobierno de Taiwán, que a su vez afirma que la República Popular China nunca ha gobernado la isla y que sólo el pueblo taiwanés puede elegir su futuro.