El fabricante español GPA Innova vendió los 170 respiradores que han provocado una investigación sobre corrupción en Bolivia a 6,600 euros cada uno (unos US$ 7,200) a la empresa también española IME Consulting, y desconoce el precio final al que fueron comprados por las autoridades de aquel país.
Según explicó el director de Estrategia, Marketing y Comunicación de GPA Innova, Jaume Miras, el único contacto que esta compañía tuvo con Bolivia fue la visita del cónsul boliviano en Barcelona, que acudió a sus instalaciones para verificar la existencia de los respiradores.
El hasta ahora ministro interino de Salud de Bolivia, Marcelo Navajas, fue arrestado este miércoles por la Policía en un caso de supuesta corrupción por la compra de estos respiradores, cuando se conoció que su coste puede superar en mucho su precio real.
Según parece, los equipos fueron adquiridos por algo más de US$ 27,000 cada uno.
En GPA Innova se mostraron “sorprendidos” por el escándalo, del que, según aseguran, se enteraron por la prensa, y afirmaron que esta empresa hizo “una venta muy clara”.
“No estamos especulando con precios porque este proyecto ha nacido para ayudar”, afirmó tajante Miras.
La empresa, radicada en la región española de Cataluña (noreste), se dedica al tratamiento de metales, pero desarrolló un respirador debido a la gran necesidad que había en España de estos aparatos para tratar a pacientes con coronavirus.
El respirador, desarrollado junto con el Hospital Clínic de Barcelona, está aprobado por la Agencia Española del Medicamento, aunque todavía no lleva el sello de marca de calidad europea CE debido a que ese proceso de certificación puede durar un año.
Tras entregar 100 unidades a los hospitales catalanes y una vez que ha bajado su demanda en España, la empresa empezó a atender otras peticiones.
Una de ellas llegó a través de la empresa IME Consulting, en la región española del País Vasco, que compró 170 respiradores a 6,000 euros la unidad, más 170 accesorios básicos a 600 euros cada uno, “precios de fábrica, porque no incluye asistencia técnica”, según Miras.
El portavoz de GPA Innova insistió en que desconoce a qué precio vendió los respiradores IME Consulting o si ésta ofreció algún tipo de servicio adicional.
“Nosotros vendimos los respiradores a esta empresa, a este precio y no sabemos más del tema”, zanjó.
Lo que sí sabe es que el destino final era Bolivia por la visita que realizó el cónsul a la empresa para comprobar la existencia de los respiradores.
Miras asegura que los respiradores vendidos son del modelo básico, que sirve para conectar a un paciente cuando está sedado, pero no para todas las fases de la enfermedad, como cuando el enfermo empieza a despertar y a querer respirar por su cuenta.