El Banco Central de la República Argentina vendió dólares a fines de julio por primera vez en tres meses para evitar que el peso se debilitara demasiado rápido en medio del nerviosismo electoral y la elevada inflación.
El banco vendió US$ 70 millones el 27 de julio, la fecha más reciente para la que hay datos en su sitio web. PR Corredores de Cambio S.C., una corredora de bolsa local, estima que durante toda la última semana del mes de julio el banco vendió US$ 310 millones.
El banco central de Argentina tiene una llamada “paridad móvil” para su tipo de cambio oficial, mediante la cual apunta a una depreciación gradual. La tasa oficial se ha debilitado más del 13% en lo que va del año, mientras que la tasa “paralela” no oficial se ha depreciado aún más rápido.
Argentina sufre una inflación anual de aproximadamente 50%, alto desempleo e incertidumbre en torno a las elecciones de mitad de período en noviembre. Los inversores locales han intensificado las compras de dólares en mercados no oficiales para protegerse de la volatilidad y la depreciación de la moneda.
Se espera que las ventas estacionales en dólares de los exportadores de cultivos comiencen a disminuir este mes, lo que podría reducir la oferta de dólares en el mercado y aumentar la presión sobre el peso.
Es probable que el Gobierno responda introduciendo medidas para frenar las importaciones, dijo Federico Furiase, director de Anker Latinoamérica, una consultora local.
Las reservas de divisas de Argentina cayeron US$ 529 millones, o 1.2%, la semana pasada a US$ 42,600 millones. Las reservas netas, que excluyen los pasivos en moneda extranjera del banco, ascienden a US$ 6,800 millones, según datos de Anker Latinoamérica.