¿Por qué las calabazas están relacionadas con Halloween? Seguramente muchas personas se han hecho esta pregunta durante bastante tiempo debido a que la verdura de color naranja tiene gran protagonismo cada 31 de octubre. Y es que la hortaliza es la apropiada para diseñar una serie de rostros en su superficie dando un aspecto tenebroso que pone los pelos de punta a más de uno. A continuación, conoce aquí cuál es su origen.
Cada 31 de octubre en Halloween, también conocida como la Noche de las Brujas, los adultos disfrutan de distintas fiestas, mientras que los niños se dedican a pedir dulces de casa en casa llevando una calabaza de juguete en sus manos. Esto debido a que la hortaliza se ha vuelto la imagen representativa de la fecha a nivel mundial.
Si bien las calabazas son hortalizas muy consumidas por las personas en distintas partes del mundo, todos los 31 de octubre esta verdura -con importante nivel nutricional- es usada para ser el plato principal de Halloween.
Así, se han diseñado de diversos rostros dando un aspecto horroroso con la finalidad de asustar a todo aquel que la vea.
LA HISTORIA DE LAS CALABAZAS: EL CUENTO DE JACK O’LANTERN
Las calabazas han sido usadas desde el siglo XIX. Según National Geographic todo se remonta a 1836 cuando un popular cuento dio origen a esta tradición. Se trata de “Jack O’Lantern” (“Jack el tacaño”), que relataba la historia de un hombre muy borracho que era tacaño y que se creía más astuto que el diablo.
Fue así que el hombre, quien además tenía mala fama, recibió la visita del diablo para comprobar si realmente era una persona muy detestable. Pero el borracho se las ingenió para evadir la astucia del diablo haciéndole perder hasta en dos ocasiones. Esto hizo que Satán se rindiera y juró que nunca se llevaría su alma al infierno.
Años después Jack murió y Dios no le permitió ingresar al cielo por todo lo que hizo en vida, fue así que el hombre bajó al infierno y le pidió al diablo entrar a ese lugar. Sin embargo, el maligno recordó que había jurado que nunca se llevaría su alma.
Como único consuelo hizo un farolillo elaborado con un nabo y en su interior colocó una brasa ardiente y eterna para alumbrar su camino.
EL USO DE LAS CALABAZAS Y EL PERSONAJE JACK
Fue así, según el citado medio, que en Irlanda y Gran Bretaña se empezó a usar farolillos con nabos para adornar las casas todos los 31 de octubre.
Allí se le comenzó a hacer rostros que simbolizaban a Jack. Además, con ello se creía que se alejaba a los espíritus malignos que deambulaban por las calles en aquellas épocas.
LA TRADICIÓN EN ESTADOS UNIDOS
Con el pasar de los años la tradición llegó a los Estados Unidos donde se inició una nueva modalidad: ya no se usaron nabos sino calabazas. Los niños vaciaban las hortalizas dejándolas huecas y luego realizaban cortes en el fruto formando diversos rostros.
Así iniciaría una de las tradiciones que hasta la fecha perdura no solo en Estados Unidos, sino también en todo el mundo. Las calabazas son usadas en reemplazo de los nabos y se les dibuja caras para espantar a la gente.
En algunas ocasiones se decoran las casas colocando velas dentro de las calabazas dando un aspecto luminoso a las hortalizas que brillan en medio de la oscuridad.
LA CALABAZA EN REEMPLAZO DEL NABO
Si bien la historia inició con un nabo, en Estados Unidos se optó por reemplazarlo por una calabaza. Así lo indicó Rob Schweitzer, vicepresidente de la Sociedad Histórica del “The Great Jack O’Lantern Blaze”, a Efe, según informó Los Ánges Times.
“Pero, en Estados Unidos, cultivamos calabazas muy bien, y las calabazas se convirtieron en parte de esa tradición, porque tuvimos muchos inmigrantes irlandeses que vinieron a este país y se adoptó el farol de Jack, pero no tanto un nabo, sino una calabaza”, precisó.
¿QUÉ ES UNA CALABAZA?
La calabaza es un fruto, según Babbel.com, que se cultiva en otoño o invierno y hay de distintas variedades y tamaños. Calabaza proviene de la palabra “pumkin” del griego “pepon” cuyo significado es “melón grande”.
Con el pasar de los años la palabra se convertiría en pumpkins para referirse a zapallos, calabazas, calabacines, etc.
De acuerdo al portal Arqueología mexicana, las calabazas pertenecen al género Cucurbita y es una planta cultivada en Mesoamérica desde hace más de 10 mil años.