FOTOGALERÍA. Una de las lecciones de negocios más notables que he aprendido tuvo lugar en una sala de reuniones en Cupertino, California. El “instructor” era Tim Cook, el CEO de Apple, según el portal entrepreneur.
Estuve allí como parte del equipo ejecutivo de Adobe, en una reunión con el líder de Apple. Mi papel en la reunión era pequeño, así que tuve una amplia oportunidad de escuchar atentamente y observar todo lo que sucedía en la sala.
Tim Cook me sorprendió. Era humilde y genuino, pasando casi todo su tiempo escuchando, reconociendo y asintiendo. Cada vez que alguien le dirigía una pregunta, Tim la redirigía al ejecutivo a cargo de esa área en particular.
A todos nos quedaba claro que es una persona brillante que entendió exactamente lo que estaba pasando, pero aparte de hacer algunas preguntas de reformulación, se dirigió a su equipo. Fácilmente podría haber dominado toda la conversación: cada vez que hablaba, la sala caía en un silencio ansioso. Sin embargo, dijo tal vez 20 palabras en una hora y media.
Lo que Tim Cook demostró ese día fue la escucha activa, y fue el mejor ejemplo que he visto de ella.
Los oyentes activos realmente buenos suelen dejar una impresión positiva porque demuestran un interés genuino y un compromiso auténtico. Los oyentes activos no apresuran a las personas y se toman el tiempo para entender haciendo preguntas significativas y reformuladoras. Cuando se hace correctamente, la escucha activa ayuda a las personas a sentirse escuchadas sin sentirse controladas.
Como demostró Tim Cook, la escucha activa es un arte crucial para cada interacción, no solo para las reuniones individuales. Los siguientes son algunos objetivos clave que aplica en cada reunión y que me han ayudado a concentrarme en escuchar activamente.
Tenemos dos productos en mi empresa, BambooHR: el primero es nuestro producto real y el segundo es nuestra cultura. Como CEO, realmente soy el gerente de producto del equipo ejecutivo. En ese rol, es vital que entienda exactamente lo que está sucediendo con nuestros dos productos.
Participar en la escucha activa con la intención de entender me ayuda a centrar mi atención durante las conversaciones importantes. Todos hemos estado en reuniones donde nadie parece estar escuchándose unos a otros, y todos están esperando su turno para decir algo. Durante esos momentos profundamente insatisfactorios, cada participante sale creyendo que sus problemas no han sido escuchados ni entendidos.
No siempre es fácil conectarse y comunicarse sin ser el centro de la discusión, especialmente para la persona a cargo. Comenzar con la intención de aprender en lugar de dirigir ayudará a garantizar que las necesidades del equipo sean claras y que las mejores ideas para las soluciones lleguen a la mesa. La escucha activa garantizará que el enfoque de cualquier líder no se limite a dar órdenes.
Un líder que practica la escucha activa aprende rápidamente que no necesita ser el centro de cada narrativa. Al tratar de comprender los desafíos y descubrir las mejores soluciones, un líder también brinda a otras personas la oportunidad de crecer y prosperar.
Tengo un amigo que puso un letrero sobre su puerta que dice “I.N.A.Y.”, que significa “It’s Not About You (no se trata de ti)”. El trabajo de un líder en cualquier empresa es hacer todo lo posible para ayudar a sus empleados a tener éxito. La escucha activa desde la cima coloca a los demás directamente en el centro de atención, lo que conduce a mejores ideas, organizaciones más competentes y un mayor potencial de éxito.
Como líder, simplemente no tienes todas las respuestas. Tim Cook demostró su comprensión de esto al dejar que los expertos en la materia hablaran de nuestras preguntas en lugar de insistir en ser el centro de atención. La escucha activa me ayuda a recordar que nuestro éxito no se trata de mí, sino de nuestra gente y nuestros productos.
En BambooHR, siempre estamos preguntando a nuestros empleados qué puede hacer la empresa para mejorar su experiencia laboral, igual que muchas otras empresas. La mayoría de las veces, tenemos tantas respuestas diferentes como personas.
Como líderes, es nuestra responsabilidad sumergirnos en toda esa retroalimentación y diversidad de pensamiento para crear políticas que mejoren la vida de nuestra gente. Tengo sesiones uno a uno con cientos de empleados cada año en busca de su opinión, y la escucha activa es una herramienta crítica para encontrar el corazón de los problemas y desarrollar soluciones que se puedan porcesar.
El bienestar de los empleados también es un área en la que es más importante de lo habitual prestar atención a mi relación entre decir y hacer las cosas. Las prácticas de escucha activa ayudan a los líderes a comprender las preocupaciones genuinas de los empleados y a comprometerse a abordar esos desafíos y tener una influencia mucho mayor en el compromiso de los empleados.
La escucha activa no significa ser invisible o menos líder. Aunque probablemente dijo menos palabras que cualquier otra persona en la sala, mi reunión en Apple fue indiscutiblemente la reunión de Tim Cook en virtud de su escucha. En otras palabras, aunque es un líder muy diferente de su titánico predecesor, era mucho más que la persona a cargo.
Los líderes pueden construir empresas fuertes cuando buscan comprender en lugar de solo instruir, dar a los demás el tiempo debido en el centro de atención y alentar a las personas a compartir comentarios procesables. Usar estas prácticas de escucha activa en cada reunión e interacción dejará una poderosa impresión y demostrará tu cuidado y preocupación por el éxito de los demás.