redacciongestion@diariogestion.com.pe
1 de 5
El Titanic traía a cerca de dos mil pasajeros, entre tripulantes y huéspedes, cuando chocó contra el iceberg que lo condenaría a la infamia. Una de las razones por las que la tragedia de este barco de la White Star Line fue tan grande es que no traía suficientes botes salvavidas ni para la mitad de pasajeros. Los botes salvavidas del Titanic eran los más innovadores del momento, pero en esas épocas la cantidad de estos vehículos se determinaba por el peso del barco y no por el número de pasajeros. (Foto: Depositphotos)
1. La importancia de las métricas

El Titanic traía a cerca de dos mil pasajeros, entre tripulantes y huéspedes, cuando chocó contra el iceberg que lo condenaría a la infamia. Una de las razones por las que la tragedia de este barco de la White Star Line fue tan grande es que no traía suficientes botes salvavidas ni para la mitad de pasajeros. Los botes salvavidas del Titanic eran los más innovadores del momento, pero en esas épocas la cantidad de estos vehículos se determinaba por el peso del barco y no por el número de pasajeros. (Foto: Depositphotos)

2 de 5
La tripulación del Titanic falló en estar al pendiente de encontrarse con un iceberg, una mala idea teniendo en cuenta lo difícil que es cambiar el rumbo de un barco tan grande. Éste fue su error fatal debido a que los témpanos se localizaban en lugares poco comunes ese año. Nuevas investigaciones revelan la razón: un inusual acercamiento lunar provocó una marea muy alta, lo que acercó los icebergs, que por lo general se mantienen cerca de las orillas y en aguas profundas. (Foto: iStock)
2. Pon atención a las “mareas”

La tripulación del Titanic falló en estar al pendiente de encontrarse con un iceberg, una mala idea teniendo en cuenta lo difícil que es cambiar el rumbo de un barco tan grande. Éste fue su error fatal debido a que los témpanos se localizaban en lugares poco comunes ese año. Nuevas investigaciones revelan la razón: un inusual acercamiento lunar provocó una marea muy alta, lo que acercó los icebergs, que por lo general se mantienen cerca de las orillas y en aguas profundas. (Foto: iStock)

3 de 5
El hundimiento del Titanic hubiese sido una tragedia menor si el barco hubiera contado con suficientes botes salvavidas. De acuerdo a RMS Titanic Inc., cuya misión es preservar los artefactos y la historia del Titanic, el barco cumplía con una ley que no había sido considerada para un buque de su tamaño. En lugar de hacer lo correcto, los ingenieros quitaron espacio para aumentar el tamaño de la cubierta y disminuir costos. (Foto: iStock)
3. Espera lo mejor, pero prepárate para lo peor

El hundimiento del Titanic hubiese sido una tragedia menor si el barco hubiera contado con suficientes botes salvavidas. De acuerdo a RMS Titanic Inc., cuya misión es preservar los artefactos y la historia del Titanic, el barco cumplía con una ley que no había sido considerada para un buque de su tamaño. En lugar de hacer lo correcto, los ingenieros quitaron espacio para aumentar el tamaño de la cubierta y disminuir costos. (Foto: iStock)

4 de 5
Un error común es pensar que el fracaso es resultado del error épico de una sola persona, cuando en muchas ocasiones es resultado de la suma de varias circunstancias. Se dice que los vigilantes de la torre del Titanic no traían binoculares; los operadores del telégrafo no prestaron atención a mensajes de advertencia de otros navíos; Bruce Ismay – el empresario dueño del Titanic- presionó al capitán Edward Smith para que el barco viajara a toda velocidad aun cuando su tamaño lo hacía difícil de maniobrar; la compañía White Star Line obligó a Thomas Andrews, arquitecto del barco, a reducir el número de botes salvavidas para que la cubierta no se viera “fea”, etcétera. (Foto: iStock)
4. Una tragedia es resultado de muchas cosas pequeñas que salen mal

Un error común es pensar que el fracaso es resultado del error épico de una sola persona, cuando en muchas ocasiones es resultado de la suma de varias circunstancias. Se dice que los vigilantes de la torre del Titanic no traían binoculares; los operadores del telégrafo no prestaron atención a mensajes de advertencia de otros navíos; Bruce Ismay – el empresario dueño del Titanic- presionó al capitán Edward Smith para que el barco viajara a toda velocidad aun cuando su tamaño lo hacía difícil de maniobrar; la compañía White Star Line obligó a Thomas Andrews, arquitecto del barco, a reducir el número de botes salvavidas para que la cubierta no se viera “fea”, etcétera. (Foto: iStock)

5 de 5
Luego del hundimiento del barco, muchas de las víctimas quedaron sin reconocer debido a que no traían papeles con ellos. La mayoría de estas personas viajaban en tercera clase a América en busca de una nueva oportunidad y su equipaje, que traía las pocas identificaciones existentes, se quedó en el fondo del Atlántico. Algunos de ellos han logrado ser identificados gracias a las muestras de ADN que se han recolectado del cementerio del Titanic en Hallifax, Canadá, pero una gran cantidad de ellos sigue sin nombre real. (Foto: iStock)
5. La importancia de la documentación

Luego del hundimiento del barco, muchas de las víctimas quedaron sin reconocer debido a que no traían papeles con ellos. La mayoría de estas personas viajaban en tercera clase a América en busca de una nueva oportunidad y su equipaje, que traía las pocas identificaciones existentes, se quedó en el fondo del Atlántico. Algunos de ellos han logrado ser identificados gracias a las muestras de ADN que se han recolectado del cementerio del Titanic en Hallifax, Canadá, pero una gran cantidad de ellos sigue sin nombre real. (Foto: iStock)

En una noche del 14 de abril, pero de 1912, el trasatlántico más grande que haya cruzado los mares, el RMS Titanic, se hundió en al fondo del norte del Océano Atlántico cobrando la vida de más de 1,500 personas. Este desastre ha capturado al imaginario popular desde hace décadas, tanto así que su historia dio la trama para una de las películas más taquilleras del cine, según .

La tragedia del Titanic, un barco que se creía tan insumergible que se decía que ni Dios mismo podía afectarlo, trae cinco lecciones importantes que cualquier emprendedor puede aplicar ante las crisis.

1. La importancia de las métricas

El Titanic traía a cerca de dos mil pasajeros, entre tripulantes y huéspedes, cuando chocó contra el iceberg que lo condenaría a la infamia. Una de las razones por las que la tragedia de este barco de la White Star Line fue tan grande es que no traía suficientes botes salvavidas ni para la mitad de pasajeros. Los botes salvavidas del Titanic eran los más innovadores del momento, pero en esas épocas la cantidad de estos vehículos se determinaba por el peso del barco y no por el número de pasajeros.

En el mismo sentido es importante que los proyectos que manejas en tu empresa estén respaldados por métricas confiables que realmente reflejen tus necesidades. Contrata a un servicio externo, haz un estudio de mercado, realiza encuestas, mide el avance de tu trabajo, etcétera. De esta manera evitarás realizar esfuerzos estériles.

2. Pon atención a las “mareas”

La tripulación del Titanic falló en estar al pendiente de encontrarse con un iceberg, una mala idea teniendo en cuenta lo difícil que es cambiar el rumbo de un barco tan grande. Éste fue su error fatal debido a que los témpanos se localizaban en lugares poco comunes ese año. Nuevas investigaciones revelan la razón: un inusual acercamiento lunar provocó una marea muy alta, lo que acercó los icebergs, que por lo general se mantienen cerca de las orillas y en aguas profundas.

Esta noticia muestra lo que le ocurre a muchas industrias como a la de la música o de renta de películas que continúan recorriendo el mismo camino, ignorando todas las señales de que el mercado se ha transformado hacia el formato digital. El resultado fue que nuevos competidores les robaron a sus clientes. Por eso debes mantenerte alerta a las nuevas tendencias y cambios en el mercado para asegurarte de que tu negocio no se vaya a la quiebra.

3. Espera lo mejor, pero prepárate para lo peor

El hundimiento del Titanic hubiese sido una tragedia menor si el barco hubiera contado con suficientes botes salvavidas. De acuerdo a RMS Titanic Inc., cuya misión es preservar los artefactos y la historia del Titanic, el barco cumplía con una ley que no había sido considerada para un buque de su tamaño. En lugar de hacer lo correcto, los ingenieros quitaron espacio para aumentar el tamaño de la cubierta y disminuir costos.

Pero el verdadero costo de esta irresponsable actitud con respecto a la seguridad fue la pérdida de más de 1,500 vidas. Aunque, esperemos, los errores en tu negocio no causarán muertes, debes realizar simulacros periódicos y evacuaciones en tus empleados. Asegúrate de que tus instalaciones estén en buen estado y que tengas un plan de emergencia, así como extinguidores y salidas especiales para evitar daños y pérdidas. Según Axa Monterrey, solo el 5% de las Pymes mexicanas cuenta con un seguro para protegerse.

4. Una tragedia es resultado de muchas cosas pequeñas que salen mal

Un error común es pensar que el fracaso es resultado del error épico de una sola persona, cuando en muchas ocasiones es resultado de la suma de varias circunstancias. Se dice que los vigilantes de la torre del Titanic no traían binoculares; los operadores del telégrafo no prestaron atención a mensajes de advertencia de otros navíos; Bruce Ismay – el empresario dueño del Titanic- presionó al capitán Edward Smith para que el barco viajara a toda velocidad aun cuando su tamaño lo hacía difícil de maniobrar; la compañía White Star Line obligó a Thomas Andrews, arquitecto del barco, a reducir el número de botes salvavidas para que la cubierta no se viera “fea”, etcétera.

En la vida de un negocio, los pequeños errores suelen ir apareciendo paulatinamente por lo que es indispensable poner atención a estos detalles y atenderlos con celeridad antes de que se conviertan en una bola de nieve que acabe por aplastarnos.

5. La importancia de la documentación

Luego del hundimiento del barco, muchas de las víctimas quedaron sin reconocer debido a que no traían papeles con ellos. La mayoría de estas personas viajaban en tercera clase a América en busca de una nueva oportunidad y su equipaje, que traía las pocas identificaciones existentes, se quedó en el fondo del Atlántico. Algunos de ellos han logrado ser identificados gracias a las muestras de ADN que se han recolectado del cementerio del Titanic en Hallifax, Canadá, pero una gran cantidad de ellos sigue sin nombre real.

A nadie le gusta tener muchos papeles en el escritorio. Sin embargo, la correcta documentación te puede evitar dolores de cabeza futuros e incluso servir de herramienta para proyectos futuros o en todo caso como defensa en momentos de crisis. Trata de mantener tus archivos en orden día con día, tanto en formato digital como físico, para que en el momento en que los necesites accedas rápidamente al papel que necesitas.