FOTOS | Albert Einstein dijo alguna vez: “El valor de una persona reside en lo que dan y no en lo que son capaces de recibir”. Es una de esas frases que se me han quedado grabadas en el corazón porque, en mi experiencia personal, ser generosa me ha hecho una mejor persona y me ha ayudado en mis momentos más oscuros. Mientras nuestro planeta lucha contra una de las peores pandemias de la modernidad, empresas como Facebook están levantando la mano para ayudar a los pequeños negocios, según Entrepreneur.
La generosidad crea impulso, tanto para individuos como para emprendedores y organizaciones. Una campaña en redes sociales que me llamó la atención en estos días es la del proyecto #BeGenerous de Kris Lindahl. Tanto la iniciativa como una entrevista reciente con Lindahl me inspiró a compartir cuatro formas en las que podemos usar nuestras plataformas para ser más generosos como emprendedores y dar algo a la comunidad cuando más necesita nuestra ayuda.
1. Crea dinámicas
En momentos como este, en el que prácticamente el mundo entero está bajo una especie de cuarentena y estamos frente a una crisis económica global, es fundamental apoyar a los que nos rodean. Lindahl comparte que las dinámicas y los regalos en redes sociales son una gran forma de ser generosos, y nos da un ejemplo de unas tarjetas de regalo que él acaba de regalar en Instagram para apoyar a los pequeños negocios. Los ganadores aleatorios reciben una tarjeta de regalo para comprar en sus negocios locales favoritos. “Las dinámicas y los regalos crean una situación de ganar-ganar, tanto para el comprador como para el negocio” agrega.
2. Únete a una ONG
Cada vez hay más organizaciones que se dan cuenta de que sus empleados tienen necesidad de tener un propósito real dentro de su trabajo. Por ejemplo, Apple iguala hasta 25 dólares por hora por el tiempo que sus empleados pasan haciendo trabajo sin fines de lucro. Y luego hay empresas como McDonald’s
que apoya a las comunidades en las que opera a través de programas inspiradores como las casas de Ronald McDonald y las becas RMHC/HACER.
Lindahl compartió que colaboró con una ONG para igualar 2,500 dólares en donaciones que ayudarán a alimentar a más de 600 niños que depende de las escuelas, y secundo el imperativo de unirte activamente a una causa en la que creas.
3. Crea una campaña de consciencia
Aprovecha el poder de las redes sociales y de los hashtags para lograr tracción para tu causa. En mi caso, creé la campaña The Whiswall con el hashtag #GiveDreamsAChance, y pude ver a la gente haciendo cosas para cumplir esos sueños para los desfavorecidos y los necesitados. Cuando vemos a alguien influyendo en los demás, buscamos emularlo y la generosidad es la misma.
Como parte del programa Be Generous, Lindahl distribuye playeras de forma aleatoria con el nombre de la campaña, y comparte que la gente ha regresado a él diciendo “No puedo usar esta playera y no ser un buen ser humano”. Él dice que es como ponerte un uniforme y vivir bajo un código moral.
Cualquier emprendedor puede crear campañas similares para impulsar su causa y hacer que más personas se sumen.
4. Abraza la generosidad como algo invaluable
Lindahl también señala que: “La generosidad es mucho más que sólo escribir un cheque, tiene que ver con donar nuestro tiempo, talento y tesoros. También significa promover una cultura laboral de voluntariados cuando se pueda”.
Yo he visto cómo se hace esto. Cuando me involucro con campañas de caridad, o dono mi tiempo para escuchar a otros e inspirarlos, a mi me ayuda a manejar mis propias batallas y cambiar de perspectiva en mi vida. Yo creo que cuando te abres a los demás, recibes una gran fortaleza y felicidad.
La generosidad da energía, emoción y compromiso. Un acto de generosidad puede ser tan simple como dedicar 10 minutos de tu día para hablar con alguien o comprarle un café o un sándwich a alguien que no haya comido. Y estos pequeños actos pueden hacerte más feliz que cualquier otra cosa que hayas hecho en el día. Las personas generosas suelen ser más felices, y la gente más feliz es la más exitosa.
Los emprendedores, influenciadores y organizaciones deben levantar la mano y mostrar su lado generoso ayudando a los que lo necesitan. Es nuestra responsabilidad usar nuestras plataformas en las que se puedan escuchar nuestras voces para hacer la diferencia en la vida de los que nos rodean y hacer de la tierra un mejor lugar para vivir. Si tienes una voz influyente, debes utilizarla para apoyar a los que son menos influyentes, porque en momentos como estos, se trata de humanidad, no de negocios.