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El superintendente de la Superintendencia Nacional de Fiscalización Laboral (Sunafil), Jesús Baldeón, presentó su carta de renuncia al cargo, a la ministra de Trabajo y Promoción del Empleo, Betsy Chávez.
Pero no sería la única renuncia, sino que también se van los altos funcionarios de Sunafil, dejando sin intendentes nacionales a la entidad.
A la renuncia de Jesús Baldeón se suma la de la gerente general de Sunafil, Teresa Velásquez; el Intendente Nacional de Supervisión del Sistema de Inspección del Trabajo (INSSI), José Rodríguez Haya; el Intendente Nacional de Inteligencia Inspectiva (INII), Óscar Moreno Rubiños; el Intendente Nacional de Prevención y Asesoría (INPA), Guillermo Fustamante.
A ellos, se suman el jefe de Recursos Humanos, Carlos Saco Chipana y dos asesores de la Superintendencia, Verushka Hidalgo y Christian López Blas.
Además, del asesor de la gerencia general de la Sunafil, Eduardo Johan Rosas.
En las cartas remitidas al superintendente de Sunafil y a la ministra solo se agradece por la oportunidad brindada sin dar mayores explicaciones ni motivos de la salida.
Este cambio se produce tras anunciarse que en la sesión del Consejo de Ministros de hoy, se trabaja un decreto supremo para la reorganización de la Sunafil.
La Sunafil es una entidad adscrita al Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo, encargada de promover, supervisar y fiscalizar el ordenamiento jurídico sociolaboral, de seguridad y salud en el trabajo, además de proponer la emisión de normas laborales.
Dato
- La renuncia masiva se produce en la víspera del debate por la censura a la Ministra de Trabajo, Betsy Chávez que se realizará el jueves en el pleno del Congreso.
- De otro lado, desde Perú Libre se busca que Sunafil fiscalice también el sector público, aunque los especialistas han indicado que dicho proceso es muy distinto al de la actividad privada.
