De cara a la segunda vuelta electoral, Pedro Castillo (Perú Libre) y Keiko Fujimori (Fuerza Popular) siguen en la carrera para conseguir más votos a 38 días hasta el 6 de junio. ¿Qué escenarios se vislumbran? Para ello se recoge el análisis de dos bancos de inversión JP Morgan y Bank of America
JP Morgan, en una investigación de mercados emergentes de América Latina (elaborado por Diego W. Pereira y Lucila Barbeito), intentó responder las 15 preguntas más comunes a las que se han enfrentado en este escenario de segunda vuelta en el Perú, las discontinuidades de las políticas y los riesgos institucionales y regulatorios.
Una de las interrogantes fue si la candidata presidencial, Keiko Fujimori, podría cerrar la brecha hasta el día de las elecciones. Como se recuerda, Pedro Castillo lidera hoy las encuestas, pero todavía queda un porcentaje importante de peruanos que han subrayado votarán blanco o viciado.
Ante este escenario, con un grupo que no le daría su voto a ninguno de los candidatos presidenciales, JP Morgan refiere que “aunque desafiante, Fujimori aún podría atraer suficiente apoyo para convertir las elecciones del 6 de junio a su favor”.
“A nuestro juicio, se trata de una condición necesaria para que la candidata persiga tal giro de los acontecimientos, negociar una amplia coalición con otros partidos, incluidos los del centro, para articular una mayoría en el Congreso. Esta coalición también debería estar representada en el Gobierno a través de un gabinete multipartidista”, refiere.
Recordó que en el 2016, en la segunda vuelta, los votos en blanco disminuyeron en un 93% y alcanzaron el 0.8% del total de votos; aunque los votos nulos se mantuvieron estables (5.7.%). “Si se observa un comportamiento similar este año, implicaría que alrededor del 25% de la población con derecho a voto aún tiene que decidir el candidato con el que apoyarse”, agregó.
Apoyo del Congreso
Un factor relevante para avanzar con las propuestas planteadas durante la campaña es el Congreso de la República. En un eventual gobierno de Pedro Castillo o de Keiko Fujimori, ¿algún candidato tendría mayoría en el Parlamento para implementar plenamente sus respectivos programas?
La respuesta es no. “Ambos candidatos presidenciales tendrían una representación muy limitada en el Congreso y necesitarían coaliciones más amplias o negociar ley por ley para ganarse el favor del Congreso”, subraya JP Morgan.
“Las agendas difícilmente podrían ser más opuestas, particularmente cuando se trata de riesgos macroeconómicos, institucionales y regulatorios (...) En cualquier caso, quienquiera que gane encontrará un gran desafío para aprobar leyes, ya que las coaliciones viables estarían lejos de ser una mayoría absoluta”, agrega (ver tabla).
En este contexto, incluso el excandidato presidencial por Avanza País, Hernando de Soto, reiteró que “ninguno” de los candidatos ofrece “una solución viable para nuestro país que asegure la gobernabilidad para el Perú”.
Las dudas sobre propuestas
Algunas propuestas del candidato Pedro Castillo, sumadas a comentarios de los virtuales congresistas de Perú Libre, han generado algunas dudas. Ante ello, JP Morgan recuerda que -por ejemplo- un cambio en la Constitución no requiere el cierre del Congreso; que la atribución de crear impuestos está sobre el Parlamento y no sobre el Ejecutivo; que la Constitución impide se expropien empresas, entre otros.
Asimismo, refiere, para lograr luz verde a iniciativas que requieran mayoría parlamentaria, dice JP Morgan, se requeriría una moderación de la agenda de reforma económica.
Bank of America Securities recomienda a inversores que tomen las encuestas con cautela
Las primeras encuestas tras las votaciones del 11 de abril colocan a Pedro Castillo, candidato de Perú Libre, en primer lugar, mientras que Keiko Fujimori, candidata de Fuerza Popular, está detrás. En este contexto, los mercados reaccionaron drásticamente.
BofA Securities en su reporte de perspectiva emergente “Peru elections: Burning questions” (elaborado por A. Muller, L. Martin, G. Tenorio, J. Brauer, C. Irigoyen), plantea una estructura similar a la de JP Morgan (ver página 2) e intenta responder a ocho preguntas vinculadas a posibles escenarios.
Pero considera que debe tomar con cautela las encuestas hasta las elecciones de junio. “Creemos que los inversores deberían tomarse las encuestas con cautela, ya que los peruanos tienden a decidir en el último minuto antes de votar, como fue claramente el caso en la primera ronda”, precisa el banco.
Agrega que las encuestas no son muy informativas en este momento dada la alta proporción de votantes indecisos, en blanco, viciados, la alta tasa de rechazo de Fujimori y la relativa falta de familiaridad de los votantes con las políticas de Castillo.
“Hay una gran parte de la población que tiene una visión muy negativa sobre el legado de Fujimori. Pero al final, las preocupaciones sobre los derechos de propiedad o la inestabilidad macroeconómica podrían llevarlos a votar por Keiko Fujimori”, remarca.
Las interrogantes
Una de las preguntas que se hace BofA es ¿cuánto podrían dañar los cambios de política al marco macroeconómico de Perú? Ante ello, menciona que “el principal control sobre la implementación de una agenda política radical o populista probablemente sea el Congreso, donde los legisladores entrantes provienen de una combinación de partidos más favorable al mercado que el Parlamento anterior”.
Sin embargo, la principal preocupación acerca de la capacidad del Congreso para controlar la Presidencia es que quien sea el presidente o presidenta tiene la autoridad para convocar nuevas elecciones para el Parlamento si se le niega dos veces la “cuestión de confianza”.
Otra de las cuestiones está relacionada a si el Perú está frente al mismo escenario que el de las elecciones presidenciales del 2011, cuando competían en segunda vuelta Ollanta Humala y Keiko Fujimori. La pregunta que se plantea es si se debería esperar un movimiento tan grande en el precio de los activos financieros como en las elecciones de 2011.
BofA considera que los inversionistas no deben esperar un movimiento tan grande en los mercados crediticios como sucedió durante las elecciones de hace 10 años. “La razón principal es que Perú ha mejorado su posición crediticia relativa desde entonces. Ha tenido una trayectoria ascendente de calificaciones durante varios años”, refiere.
Otro factor que podría limitar la reacción del mercado es que la representación de Castillo en el Congreso entrante será menor que la de Humala aquel año.
Dudas sobre Castillo
BofA esperaría que el Banco Central de Reserva (BCR) intensificara su intervención en los mercados cambiarios para contrarrestar cualquier volatilidad provocada por la incertidumbre electoral. “El BCRP ya intensificó su intervención desde la primera vuelta electoral, con ventas promedio de S/ 110 millones por día, la gran mayoría a través de swaps cambiarios”, anotó.
Aun así, en el reporte se recordó que el partido de Castillo (Perú Libre) ha acusado al BCR de intervenir en las elecciones al permitir que el sol se deprecie a un ritmo acelerado para asustar a la población sobre las perspectivas de una presidencia de Castillo. “Esta acusación carece de evidencia, ya que el régimen cambiario de Perú no es fijo sino flotante, y el BCRP solo interviene para moderar la volatilidad”, anotó.