Para potenciar la caficultura peruana y hacerla más resistente a plagas -principalmente de la roya amarilla-, el Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego (Midagri) aprobó el ingreso de germoplasma de café de alta calidad genética de origen etiopiano proveniente del Centro Agronómico Tropical de Investigación y Enseñanza (Catie) de Costa Rica.
Así, a través del Instituto Nacional de Innovación Agraria (Inia), se ampliará a más de 215 acciones la colección nacional del banco de germoplasma de café, además de incrementar las investigaciones para la generación de híbridos o variedades con buena resistencia a plagas y enfermedades.
Entre los trabajos que se desarrollarán con el nuevo material genético, se tiene programado aplicar técnicas de investigación como las de cruzamiento con 26 genotipos de café que fueron identificados por presentar tolerancia a la roya amarilla, y que vienen siendo probados en diferentes pisos agroecológicos en el Cusco, con miras a obtener una nueva variedad en los próximos años.
También se analizará la caracterización molecular e identificación varietal de accesiones sobresalientes de café, así como la identificación de la diversidad y estructura genética de la roya amarilla en las regiones de Cusco y Junín, a fin de disponer de tecnologías para la propagación masiva de clones élites de café vía embriogénesis somática con alta calidad de taza.
De acuerdo al Midagri, en los últimos años se han ejecutado 298 proyectos de investigación y extensión agraria a favor de más de 50,000 productores de café, con una inversión de S/ 140 millones. Lo que ha permitido que en la selva central y norte cafetalero (Jaén y San Ignacio) la producción del café pase de 18 a 21 quintales por hectárea, y de 12 a 16 quintales en el sur del país (Quillabamba-Cusco y Sandia-Puno). Además, se ha mejorado el rendimiento físico y la calidad de taza del café de 78 a 83 puntos logrando que las regiones de Cajamarca, Amazonas y Junín potencien la agroexportación cafetalera y las competencias empresariales.