Los precios del oro cotizaban en un rango estrecho el jueves, tras tocar un máximo de dos semanas al principio de la sesión, mientras los inversores esperaban los datos de inflación de Estados Unidos para conocer pistas sobre los próximos movimientos en los planes de ajuste de la política monetaria de la Reserva Federal.
A las 09:55 GMT, el oro al contado operaba estable a US$ 1,832.09 por onza, tras alcanzar un máximo de dos semanas de US$ 1,835.67. Los futuros del oro en Estados Unidos bajaban un 0.2% a US$ 1,832.20.
“El oro parece estar redescubriendo por fin su lugar como cobertura de la inflación y ahora se está moviendo independientemente de los rendimientos en Estados Unidos”, dijo Michael Hewson, de CMC Markets UK.
“Si las expectativas inflacionarias empiezan a aumentar, esto podría impulsar al alza al oro, ya que podría llevar a la Reserva Federal a endurecer su política monetaria con demasiada rapidez, frenando potencialmente a la economía mundial”, agregó.
Se espera que el índice de precios al consumo de Estados Unidos para enero, previsto para las 13:30 GMT, haya aumentado un 7.3% anual, lo que supondría el mayor incremento de este tipo desde 1982.
Una lectura robusta de la inflación aumentaría el atractivo del oro como cobertura, pero las subidas de las tasas de interés elevarían el costo de oportunidad de mantener lingotes, que no devengan intereses.
En otros metales preciosos, la plata al contado subía un 0.2% a US$ 23,33 la onza, el platino caía un 0.9% a US$ 1,024.67, y el paladio ganaba un 0.5% a US$ 2,290.36.
Con información de Reuters.