Los precios del petróleo, que subieron un 50% en el 2021, seguirán subiendo este año, según los analistas, que afirman que la falta de capacidad de producción y la escasa inversión en el sector podrían elevar el crudo por encima de los US$ 100 el barril.
Aunque la variante ómicron del coronavirus ha impulsado los casos de COVID-19 muy por encima de los máximos alcanzados el año pasado, los analistas afirman que los precios del petróleo se verán respaldados por la reticencia de muchos Gobiernos a restablecer las estrictas restricciones que golpearon la economía mundial cuando la pandemia se instaló en el 2020.
Los futuros del crudo Brent cotizaron el miércoles por encima de los US$ 84, alcanzando máximos de dos meses.
“Suponiendo que China no sufra una fuerte desaceleración, que ómicron desaparezca, y con la capacidad de la OPEP+ de aumentar la producción claramente limitada, no veo ninguna razón por la que el crudo Brent no pueda acercarse a los US$ 100 en el primer trimestre, posiblemente antes”, dijo Jeffrey Halley, analista de mercado de OANDA.
La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y sus aliados, un grupo conocido como OPEP+, están relajando gradualmente los recortes de producción implementados cuando la demanda se desplomó en el 2020.
Sin embargo, muchos de los productores más pequeños no pueden aumentar la oferta y otros se han mostrado cautelosos a la hora de bombear demasiado petróleo en caso de nuevos contratiempos por el COVID-19.
“No queremos ver US$ 100 por barril. El mundo no está preparado para eso”, dijo el martes el ministro de Petróleo de Omán, Mohammed Al Rumhi, citado por Bloomberg.
Morgan Stanley predice que el crudo Brent alcanzará los US$ 90 por barril en el tercer trimestre de este año. Con la perspectiva de que los inventarios de crudo se agoten y la capacidad de reserva sea escasa para la segunda mitad del 2022, y las inversiones limitadas en el sector del petróleo y el gas, el mercado tendrá poco margen de seguridad, dijo el banco.
Standard Chartered, por su parte, ha elevado su previsión de Brent para el 2022 en US$ 8, hasta US$ 75 por barril, y su previsión de Brent para el 2023 en US$ 17, hasta los US$ 77.
Los analistas de JP Morgan también prevén que los precios del petróleo suban hasta US$ 90 a finales de año. La fortaleza de la demanda actual está actuando como un factor que impulsa los precios a corto plazo, habiendo demostrado ser en gran medida inmune al aumento de las infecciones por coronavirus, según el banco.