El petróleo registró la racha más larga de avances semanales desde el 2015, debido que los productores de la OPEP+ están abasteciendo solo modestamente al mercado y a medida que se contraen los suministros de crudo estadounidense.
Los futuros del crudo registraron un alza de 1.5% el viernes en Nueva York, para su novena semana consecutiva de avances. El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dijo el jueves por la noche que los estadounidenses deberían esperar que los altos precios de la gasolina continúen el próximo año debido a que la OPEP y otros productores de petróleo extranjeros están reteniendo suministros.
Las existencias en el mayor centro de almacenamiento de Estados Unidos se están agotando a niveles que no se observaban desde que los precios del crudo se ubicaban en US$ 100.
Si bien los precios generales han sido volátiles durante las últimas dos sesiones, la escasez estructural de suministros ha sido el mayor impulsor de los mercados, dijo John Kilduff, socio de Again Capital LLC. “No hay un sentido real en el mercado de que la OPEP+ vaya a ofrecer una cantidad significativa de petróleo adicional en un futuro próximo”.
Esta semana, el petróleo se disparó a su nivel más alto desde el 2014 ante la preocupación de que el aumento del consumo vaya a superar a los suministros.
La escasez de gas natural y carbón está provocando una demanda adicional de productos petroleros. Mientras tanto, nuevamente la OPEP y sus aliados no lograron extraer la cantidad suficiente de petróleo para cumplir con sus objetivos de producción, lo que exacerba el déficit de suministros medida que el mundo se recupera de la pandemia de coronavirus.
“Lo que veo es un mercado que está descontando correctamente condiciones muy ajustadas, y condiciones que se volverán aún más ajustadas”, dijo David Martin, encargado de estrategia de la mesa de productos básicos de BNP Paribas.
Un indicador clave del mercado físico, el llamado “cash roll”, ha subido a su nivel más fuerte desde el 2018, una de una serie de señales de esta semana de que los operadores están descontando suministros cada vez más escasos en el vital centro estadounidense.
La predicción de Biden de que los precios se mantendrán altos se hizo eco de opiniones de analistas, quienes señalan que se ha disparado la demanda de conductores que están regresando a las carreteras. Un indicador clave de la demanda de gasolina de Estados Unidos avanzó esta semana a su nivel más alto para esta época del año desde el 2007.
Sin embargo, Arabia Saudita señaló que, de haber petróleo adicional de la OPEP+, este haría poco para controlar el creciente costo de la gasolina.