Ante el comienzo del debate esta semana de un cuarto retiro de las AFP en el Congreso, algunos operadores de renta fija recomiendan refugiarse en los más líquidos papeles de Tesorería, según el último sondeo de Bloomberg News.
El porcentaje de entre 17 operadores y analistas encuestados que prefieren sobreponderar deuda del Gobierno en lugar de corporativos aumentó de 33% el mes anterior a 47%, el nivel más alto desde que se inició este sondeo en abril.
El cambio es una reacción a un posible aumento en la volatilidad antes de la votación sobre los retiros de fondos de pensiones, dijo Jaime Achondo, gerente general de la firma de corretaje Fynsa.
Si bien los tres retiros anteriores se aprobaron con una amplia mayoría, el resultado en éste no está claro. El presidente del Banco Central de Chile, Mario Marcel, también intervino en el debate y dijo que nuevos retiros agudizarían la inflación y tensarían los mercados financieros, algo que el banco tendría dificultades para “neutralizar”.
“Los inversionistas están privilegiando activos más líquidos como bonos de Tesorería en desmedro de activos menos líquidos como corporativos, en un contexto en que se espera volatilidad para las próximas semanas”, dijo Diego Pino, jefe de trading de bonos corporativos y acciones en Scotiabank.
La Comisión de Constitución de la Cámara de Diputados comenzará a votar las propuestas de retiros de pensiones el miércoles. Los chilenos han retirado alrededor de US$ 50,000 millones en los tres retiros anteriores.
Vinculados a inflación
Entre los bonos del Tesoro, el 82% de los encuestados prefiere bonos en Unidades de Fomento vinculados al IPC con vencimientos entre uno y cinco años, ante una aceleración del crecimiento económico y la inflación. La cifra se ha mantenido alta desde la encuesta de julio.
Otro 6% de los encuestados dijo preferir bonos en UF entre seis y once años, mientras que el 12% se inclinó por vencimientos de más de doce años. Nadie dijo preferir bonos en pesos.
Otros datos clave de la encuesta
Según el 88% de los encuestados, los rendimientos de los bonos del Gobierno en pesos aumentarán en setiembre. Poco más de la mitad de este grupo piensa que la curva se empinará como resultado de que tasas de plazos más largos aumenten más que aquellas de plazos cortos, mientras que el resto estima que la curva se aplanará con mayores movimientos en los rendimientos cortos. Del 12% que esperaba que los rendimientos cayeran, todos pronostican que el movimiento se concentraría en el extremo largo de la curva.
El mercado está dividido en cuanto a los bonos en UF, ya que el 47% de los encuestados piensa que los rendimientos aumentarán el próximo mes, mientras que el 53% espera una caída. Sin embargo, el 76% apuesta a que la curva se empinará, y que el extremo más corto superará el desempeño del extremo más largo.
En el frente corporativo, las preferencias casi no variaron respecto de los últimos dos meses. Casi las tres quintas partes de los encuestados prefieren invertir en bonos de empresas con calificación “AA” o superior, mientras que el 18% también apostaría por emisores “A” y el 24% se arriesgaría incluyendo empresas “BBB” en sus portafolios.
La política local sigue siendo el motor más importante de los rendimientos, según el 82% de los encuestados. Otro 12% piensa que los datos macroeconómicos determinarán los movimientos del mercado en setiembre, mientras que el 6% restante votó por los bonos del Tesoro de EE.UU.
Más de un tercio espera que aumenten los diferenciales de los bonos bancarios, mientras que otro 30% dijo que bajarán. El resto cree que no habrá cambios significativos.