FOTOS | Muchas conversaciones pierden su punto. Hablamos entre nosotros, sobre los demás e inventamos cosas que se adecúen a nuestras motivaciones y necesidades. Nos podemos comunicar 24/7 desde cualquier lugar del mundo, a cualquier hora, pero eso no es suficiente. Necesitamos tener la sabiduría para conectarnos.
Necesitamos Inteligencia Conversacional, un marco de trabajo concreto para saber qué tipo de conversaciones disparan actividad cerebral de nivel bajo, como los instintos primitivos de pelea o de contemporización, a comparación de aquellas que generan alto nivel de actividad cerebral, como la confianza, la integridad, el pensamiento estratégico y la habilidad para procesar situaciones complejas.
Cuanto más aprendemos sobre cómo funciona realmente el cerebro, y cuánto de nuestro cerebro está dedicado a la conexión social, más nos damos cuenta del poder que tiene conectar con los demás de maneras saludables y productivas para el éxito de ambos.
Estos consejos pueden ayudar a construir un mayor coeficiente intelectual de conversación, según la situación: