El Instituto Peruano de Economía (IPE) informó que la inversión pública se desaceleró en agosto al anotar un crecimiento real de 13%. Este resultado se explicó por la caída de 10% de la inversión del Gobierno Nacional, que contrarrestó la expansión de 27% alcanzada por el nivel subnacional.
Con la cifra de agosto, la inversión pública acumulada en el año cayó 1.1% en términos reales frente a lo registrado el año pasado. Esto respondió, principalmente, a la menor ejecución del Gobierno Nacional en los primeros ochos meses con una caída de14%.
Según funciones, la inversión pública en saneamiento, en el período enero-agosto, se redujo en casi un quinto frente al mismo periodo de 2021, debido a la menor ejecución en los programas de saneamiento urbano y rural. Por el contrario, la inversión en el agro continúa expandiéndose, impulsada por la mayor ejecución en proyectos hídricos, entre ellos, el megaproyecto Majes-Siguas II en la región Arequipa.
A nivel de los gobiernos regionales, el IPE destaca el desempeño en la ejecución de recursos para obras públicas que vienen teniendo Junín, Apurímac y Arequipa. En el otro extremo, La Libertad, Cajamarca, Ica y Huánuco han ejecutado menos de un cuarto de su presupuesto asignado para inversión.
En tanto, respecto a los gobiernos locales, las municipalidades pertenecientes a Callao y Loreto presentan el mayor avance en inversión pública. Lo contrario a Ica, Áncash y Pasco.
De otro lado, cabe mencionar que la Reconstrucción con Cambios (RCC), ejecutada bajo el mecanismo de Gobierno a Gobierno, representó el 29% del monto invertido por el Gobierno Nacional en agosto. Sin lo relacionado a este proyecto, la inversión pública del Gobierno Nacional habría caído 31% en términos reales y no 10%.
Por último, otros aspectos a destacar son que, el 1 de setiembre, el Congreso aprobó el proyecto de ley presentado por el Ejecutivo para facilitar el destrabe de Chavimochic III, megaproyecto paralizado desde 2017.
Además, en el período enero-agosto también se observa que el ritmo de inversión de la Línea 2 del Metro de Lima ha caído notablemente: casi dos tercios menor que el mismo periodo del año previo.