Desde que Sacyr ingresó al Perú, su interés está en las obras de infraestructura. Solo en el caso de las carreteras, la firma española se ha adjudicado cuatro proyectos, con lo que suman 742 kilómetros en ejecución y S/ 995 millones de monto contratado en total.
Miguel Ángel Sáez, gerente general de Sacyr Ingeniería e Infraestructuras en Perú, afirma que entre los cuatro proyectos figuran la carretera Santiago de Chuco–Mollepata en La Libertad; la carretera 5R en Áncash, el mantenimiento periódico inicial (MPI) de la Carretera Longitudinal de la Sierra – Tramo 2 en Cajamarca; y el Tramo 1 de la Vía de Evitamiento de Chimbote.
Con relación a este último proyecto, el segundo que se adjudica la compañía en Áncash, Sacyr estará a cargo de la construcción de los 10 primeros kilómetros (de doble calzada) de los 40 km que comprende el proyecto en total, además de la construcción de dos puentes (Lacramarca y Santa).
Tras concretar la adjudicación de la Concesionaria Autopista del Norte (Aunor), el plazo de ejecución de las obras –valorizadas en más de S/ 181.5 millones– será de 18 meses.
“En la región Áncash hemos liderado un proyecto de la Reconstrucción con Cambios y ahora, con este contrato privado, seguiremos afianzando nuestra posición de liderazgo en el sector de desarrollo de infraestructuras en el país”, sostiene Sáez.
En crecimiento
Para confirmar su apuesta en el sector, comenta que Sacyr cuenta con 11 contratos activos, incluidos los cuatro de carreteras.
Solo el año pasado, la firma española se adjudicó la construcción de la segunda pista de aterrizaje del aeropuerto Jorge Chávez, obra con la que se duplicará la capacidad de operación del terminal aéreo.
También en el 2020 –a través de Sacyr Ingeniería e Infraestructuras– firmó contrato con Provías Nacional para la rehabilitación y mejora de 77 kilómetros de la carretera Mollepata–Santiago de Chuco. El importe del contrato, que se desarrollará en dos años, asciende a poco más de US$ 116 millones.
A estos dos últimos proyectos se le suman –entre otros– la rehabilitación del aeropuerto internacional de Chiclayo, y la construcción del chancador primario, faja transportadora y taller de camiones de la mina Quellaveco, con lo que marcó su ingreso en el 2019 al sector minero peruano con un contrato de construcción industrial en el que participaron Sacyr Industrial y Sacyr Ingeniería e Infraestructuras con Anglo American.