La estatal Petroperú espera presentar sus estados financieros auditados en el mejor de los casos a fines de julio, dijo a Reuters el martes su nuevo gerente general, Fernando de la Torre, confirmando que no cumplirá con el plazo previsto de mayo.
Petroperú perdió este mes su grado de inversión por parte S&P Global Ratings debido a la incertidumbre generada cuando la firma de contabilidad PwC canceló firmar contrato para auditar los estados financieros de la empresa, en medio de discrepancias dentro de la petrolera y con la contraloría peruana.
“El escenario optimista es a fines de julio, el escenario conservador es a fines de agosto y el pesimista es a fines de setiembre”, dijo De la Torre en una conversación telefónica.
La compañía petrolera tiene que encontrar un nuevo auditor para revisar sus estados financieros de 2021. Se espera ofertas del posible auditor hasta el 5 de abril, dijo el ejecutivo.
De la Torre, que se desempeñaba como gerente de finanzas de la compañía, fue elegido en una junta de accionistas el lunes como gerente general encargado (de forma temporal) tras renuncia de su antecesor después de criticas a su gestión, entre ellas del mismo ministro de Economía y Finanzas, Óscar Graham.
Petroperú ha emitido bonos por US$ 3,000 millones, incluida una reciente emisión de US$ 1,000 millones para terminar la modernización de su refinería Talara en el norte de Perú. Además tiene un préstamo de US$ 1,300 millones de la Compañía Española de Seguros de Créditos a la Exportación (CESCE) para este proyecto.
Los bonos de Petroperú cayeron tras la noticia del 28 de febrero de que PwC rechazó realizar la auditoría. Los contratos de bonos y créditos señalan que Petroperú debe presentar su auditoría antes de mayo, de lo contrario podría encontrarse en un incumplimiento técnico.
De la Torre dijo que han iniciado la selección de dos bancos para que “manejen el consentimiento de los bonistas” en busca de una dispensa por el retraso en la presentación de los resultados auditados. Asimismo, refirió que están trabajando con Deutsche Bank para que tramite una presentación con sus acreedores.
“En el peor de los casos esto debe de estar documentado tanto en el lado de los bonistas como en los bancos a finales de abril”, afirmó el ejecutivo.
Bajo la administración del presidente izquierdista Pedro Castillo, Petroperú ha anunciado que planea reanudar la producción de petróleo por primera vez en décadas, aunque en niveles mínimos. La compañía, una de las más grandes del país, ha sido criticada por una constante rotación de ejecutivos.
Castillo está bajo presión para bajar los precios del combustible que se han disparado tras la invasión rusa de Ucrania. Perú importa la mayor parte del crudo que consume.
De la Torre dijo que su próxima prioridad en la empresa sería recuperar el grado de inversión, que perdió según S&P Global Ratings por las tensiones con su auditor y un debilitamiento de su gobierno corporativo en medio de condiciones políticas inciertas en Perú.
El ejecutivo manifestó que en círculos financieros se decía que los auditores no querían trabajar mientras no renunciara el anterior gerente general. “Eso ya cambio (...) esperamos ahora que ese sentimiento haya cambiado” con el objetivo de recuperar la confianza, añadió.
De la Torre dijo que espera inaugurar la modernización de la refinería Talara en abril, y con ello iniciar un camino para obtener utilidades y tener flujo de caja desde el 2023.
Petroperú está ampliando Talara, ubicada en el norte del país, con una inversión estimada de US$ 4,700 millones para elevar su capacidad de procesamiento a 95,000 barriles de crudo por día desde los 65,000 barriles actuales.