Washington redujo este viernes la prohibición a aerolíneas chinas de volar hacia y desde Estados Unidos a partir del 16 de junio, después de que Pekín autorizara a las compañías aéreas estadounidenses a retomar vuelos entre ambos países.
El Departamento de Transporte estadounidense había indicado el miércoles que las aerolíneas chinas ya no podrían volar hacia Estados Unidos a partir del 16 de junio.
Su decisión fue una represalia porque Pekín había rechazado la solicitud de Delta Air Lines y United para retomar sus operaciones con China este mes.
Tras no haber contestado a las dos aerolíneas, Pekín anunció el jueves que cada compañía estadounidense podrá realizar un vuelo por semana entre los dos países.
A raíz de esa decisión, Washington indicó este viernes que las compañías chinas podrán hacer dos vuelos por semana hacia Estados Unidos.
Las autoridades estadounidenses afirmaron, no obstante, que las restricciones impuestas por Pekín a las aerolíneas violaban el acuerdo sobre el transporte aéreo que firmaron los dos países en 1980.
Y se mostraron dispuestas a modificar el trato a las aerolíneas chinas si Pekín hace lo mismo con las estadounidenses.
"El principal objetivo del Departamento no es perpetuar esta situación, sino mejorarla para que los transportistas de ambos lados puedan ejercer plenamente sus derechos bilaterales", declaró el ministerio de Transporte.
Cuatro compañías aéreas chinas realizan actualmente vuelos entre Estados Unidos y su país, frente a ninguno para las estadounidenses.
A comienzos de enero y antes de la pandemia, compañías aéreas chinas y estadounidenses realizaban unos 325 vuelos semanales entre ambos países.
Los aviones de mercancías no se ven afectados por la suspensión de los vuelos.