El 51% de los empresarios confía en que la rentabilidad de su organización aumentará en los próximos años y el 57% proyecta que su facturación se incrementará, según el III Índice de Confianza elaborado por Vistage Perú, la red de pares de CEO y ejecutivos. Para que esto se cumpla en el tercer año de pandemia, es necesario trazarse plazos precisos y tener un balance de recursos pormenorizado.
Ignacio Mealla, director de Vistage Perú, revela cuatro elementos que deben tener en cuenta las empresas para establecer metas concretas de cara al 2022.
1. El valor de los fletes marítimos. Ser flexible y manejar varias opciones en las cadenas de suministro fueron los dos ejes que ayudaron a las empresas a mantenerse en pie durante los momentos más duros de la pandemia. Las organizaciones deben de considerar el grado de vulnerabilidad que tienen frente al aumento de los fletes marítimos durante este año.
El traslado de los contenedores desde China llegó a cuadriplicar sus precios en 2021. Sus efectos directos no solo los perciben quienes están inmersos en el negocio de la importación de productos, sino también los que trabajan con materia prima importada o requieren piezas producidas en el extranjero para el mantenimiento y reparación de sus equipos.
“Es crucial analizar cómo la empresa puede lidiar con los nuevos precios de los fletes marítimos que, a juicio de los analistas, se mantendrán durante varios meses. Es importante tomar en cuenta también cuál es el margen de retraso que está fijado en las operaciones, en caso que la lentitud en el envío de los contenedores pueda agravarse más en el primer semestre”, señala Mealla.
2. Grado de automatización de la empresa. Todos los reportes coinciden en que el camino del crecimiento empresarial está marcado por la inversión en tecnología. “Utilizar la automatización o la inteligencia artificial puede ser un gran motor para ayudar a las empresas a alcanzar nuevas cifras de producción o de rentabilidad. No obstante, antes de fijar las metas en transformación digital, es necesario diagnosticar el sistema informático actual y evaluar las opciones de mejora que puedan implementarse en el corto plazo en la compañía”, considera el director de Vistage Perú.
3. Riesgo de la ciberseguridad. Los CEO perciben los riesgos cibernéticos como la amenaza más importante a vencer en los próximos tres años. Entonces, es crucial que las metas de 2022 consideren cómo disminuir la vulnerabilidad digital dentro de la empresa.
Una recomendación es incorporar un componente de seguridad digital para cada una de las metas que se proponga la empresa. De esta forma, la ciberseguridad se plantea como una línea transversal que alcance a todas las áreas de la organización y que ayude a reducir el impacto financiero o de reputación de un incidente cibernético. Asimismo, resulta útil para proteger la data de la compañía, de los clientes y de los proveedores.
4. Motivación del talento humano. La vacunación contra el coronavirus y el retorno a la “normalidad” avanzan, pero el talento humano aún arrastra mucha presión asociada con la pandemia, por lo que es importante incluir un objetivo asociado a mantener la motivación del talento humano.
El principal motivo de fuga de talento se debe a la falta de una estrategia de retención de talento (41%), según el estudio “Retos del talento humano que enfrentan los CEO este 2022″, elaborado por Vistage Perú y Cornerstone a CEO peruanos. “Apoyar a los gerentes medios o a los especialistas en posiciones claves es también una vía para asegurarse de que las metas empresariales de 2022 puedan cumplirse”, enfatiza Mealla.