Los proyectos viales en la Amazonía podrían impulsar la deforestación de millones de hectáreas durante los próximos 20 años, dijeron investigadores ambientales en un informe.
La construcción o mejora de unos 12,000 kilómetros de vías en la selva amazónica de Bolivia, Brasil, Colombia, Perú y Ecuador durante los próximos cinco años podría causar la deforestación de 2.4 millones de hectáreas en las dos décadas posteriores, según el reporte, una evaluación de los progresos en la Declaración de Nueva York sobre los Bosques (NYDF por sus siglas en inglés), que no es vinculante.
El compromiso de la NYDF de reducir a la mitad la deforestación para este año no se cumplirá, según el informe, mientras que otro compromiso de poner fin a la deforestación para el 2030 necesitará “una reducción sin precedentes” en las tasas anuales de pérdida de bosques.
Se cree que la infraestructura es directamente responsable de entre el 9% y 17% de la deforestación en los países tropicales y subtropicales. Y también hay un efecto indirecto.
“El impacto indirecto (de las carreteras) es lo importante”, dijo Franziska Haupt, directora ejecutiva de la oficina de Climate Focus en Berlín y autora principal del informe.
La construcción de carreteras en áreas de importancia ecológica no solo implica la tala de árboles, sino que también genera otras actividades que dañan el medio ambiente, explicó.
Las carreteras a través de la selva tropical provocan la especulación de la tierra, así como la construcción de caminos ilegales.
Por cada kilómetro de carretera legal en Brasil, se estima que hay tres kilómetros de vías ilegales, según el informe.
“El solo hecho de tener el plan (de construcción de carreteras) genera cierta especulación, porque la gente espera que las concesiones en estas áreas sean accesibles y más viables”, dijo Haupt, refiriéndose a la minería potencial y otros proyectos de gran escala.
Los gobiernos deben buscar rutas alternativas para el desarrollo siempre que sea posible, sostuvo el informe.
“Estas no son carreteras diseñadas para priorizar la vinculación de las comunidades con la atención médica, otros servicios esenciales u oportunidades económicas”, afirmó en un comunicado el coautor del informe, Anthony Bebbington. “Su propósito es facilitar el movimiento de mercancías”, concluyó.