La porcicultura peruana se alista a seguir los pasos de Chile y llegar a exportar más de US$ 500 millones al año, tal como lo hace el vecino del sur. El primer país con el cual se espera reanimar la venta de carne de cerdo peruana al exterior es China.
Ana María Trelles, presidenta de la Asociación Peruana de Porcicultores (APP) explicó a Gestión.pe que ya empezaron las gestiones –a cargo del Senasa– para lograr el protocolo sanitario correspondiente y abastecer a este gran mercado, asiduo consumidor de esta carne. Normalmente este tipo de acuerdos toma entre uno a dos años. No obstante, ante la necesidad de China –cuya producción local sufre los embates de la peste porcina africana– de abastecerse de este carne, se esperaría que el acuerdo se concrete antes de julio de 2020.
“China tiene un problema sanitario muy fuerte, que es la peste porcina africana, que es una enfermedad que no se encuentra en América Latina –el Perú está libre de ella– por lo que ha tenido una reducción de su producción y están comprando todo el cerdo del mundo, lo que es una oportunidad de oro para los casi 600,000 pequeños productores peruanos”, acotó.
Es así, que en los próximos días (entre hoy y mañana) se espera el arribo de una delegación oficial –procedente de este país, liderada por el viceministro de la Administración General de Aduanas, Hu Wei– que se reunirá con técnicos del Senasa y que –además– visitarán diversas plantas de producción para conocer –de primera mano– el desarrollo de esta industria.
“Nuestra expectativa es que antes de julio del 2020 empecemos a venderle a China”, subrayó Trelles. Como parte del procedimiento para concretar el protocolo sanitario, China ha remitido a Perú –específicamente el Senasa– un cuestionario técnico y especializado que está siendo respondido por los funcionarios de esta entidad con apoyo de los técnicos de la APP. Tras ello se esperaría la visita de peritos especializados, que van a certificar las plantas de faenamiento.
“Es por eso que nosotros (como gremio) queremos aprovechar la visita oficial para llevarlos a conocer la planta Esmeralda”, agregó.
De concretarse la exportación de carne de cerdo peruana a China, la representante gremial aseguró que los productores peruanos (598,363 porcicultores a nivel nacional) tienen capacidad para enviar mensualmente entre dos a cuatro contenedores, que significan 100,000 kilos de carne de cerdo, cantidad que podría incrementarse o duplicarse de acuerdo a la necesidad.
“Tenemos empresa que ya están preparadas para este reto como es el caso de Redondos o de Corporación Rico en Arequipa, que es la segunda empresa de producción porcina que tiene toda un cadena valor e incluso su propia planta de faenamiento, su propio centro de cortes, mientras que Redondos ya está próximo a implementar su propio matadero, estamos preparándonos para el mercado internacional”, dijo. China no es el único país en la mira de la industria porcicultura.
La mirada de los productores también está en la propia Comunidad Andina (CAN), mercado a la que se tiene acceso desde el 2002. Sin embargo, uno de los principales problemas con este bloque –que ha impedido la exportación de la carne peruana de cerdo a Ecuador y Bolivia– es que son muy proteccionistas
“Desde un inicio nos pusieron una serie de obstáculos administrativos, que nosotros lo consideramos como obstáculos técnicos al comercio, que en su momento lo denunciamos. Lamentablemente, Ecuador nos cerró las puertas y también Bolivia que a pesar de que teníamos los permisos correspondientes, adujeron una serie de excusas para evitar la salida del cargamento de Corporación Rico y de Supemsa que tenían hasta setiembre de 2019 para concretarse la venta”, arguyó.
Otros mercados en la mira son la Unión Europea, Japón y Corea países con las que el Perú ha suscrito acuerdos de libre comercio. Únicamente faltaría –al igual que China – cumplir con los requisitos sanitarios, y lo acuerdos correspondientes (en este tema) para iniciar la venta de carne de cerdo al exterior. Una de las ventajas que tiene el Perú es que esta libre de la peste de la fiebre porcina, que causa estragos en algunos países de Asia, en particular en Vietnam y China, y que debería continuar en los próximos años.
“Estamos en un proceso de erradicación de esta enfermedad trabajando de la mano del Senasa desde el 2011. En dos años debemos estar declarando zonas libres a las regiones de Arequipa, Moquegua y Tacna para que sean las primeras de donde se va a exportar a estos mercado de la UE, Japón, Corea, que tienen mayor capacidad adquisitiva y pagan muy bien por los cortes más finos”, aclaró.
-El modelo de Chile-
Ana María Trelles dijo que un escenario ideal y que podría replicarse en Perú, es lo que ocurre en la porcicultura chilena.
“Chile exporta mucha carne de cerdo a todo el mundo, más de US$ 500 millones al año e importa cortes de Estados Unidos para su mercado local. Venden al exterior los cortes de mayor valor. Eso es lo que también pretendernos a mercados como Japón, Corea y la UE, que compren cortes finos y de mayor valor e importar o consumidor lo que tenemos en la producción local. Estamos en capacidad (los productores peruanos) de abastecer al 100% de la población, lo que se importa no llega ni al 5% de la demanda interna”, mencionó.
La producción anual de carne porcina en Perú llega a las 220,000 toneladas por año y el consumo por persona supera los 7 kilos. La meta de llegar al Bicentenario con un consumo de 10 kilos per cápita y al 2030, a los 18 kilos per cápita, que ubicaría al país por encima del promedio de Sudamérica que es de 14 kilos por persona.
Igualmente, 10,000 toneladas de carne de cerdo se importan al año, provenientes de Estados Unidos (45%); Chile (40%) y Canadá (15%). Básicamente, el 80% de la importación se orienta a las fábricas de embutidos para la elaboración de salchichas y el 20% a la venta en supermercado o restaurantes.