Las exportaciones peruanas cerraron el 2014 con una contracción de -10.3%, luego que diciembre registrara el peor retroceso de todo el año pasado (-18.2%).
"Si bien las exportaciones no han tocado fondo todavía, se augura que este 2015 será el cuarto año de caída consecutiva. Sólo con un trabajo arduo y dedicado se podrá revertir esta tendencia", señaló el presidente de la Asociación de Exportadores (Adex), Gastón Pacheco.
En efecto, los despachos totales sumaron US$ 38,181 millones en el 2014, un 10% menos que el 2013 (US$ 42,577 millones), afectados principalmente por la caída de 16% de las exportaciones tradicionales.
Respecto a las exportaciones no tradicionales, cerraron el 2014 con un débil crecimiento de 5%, lo que sumado a la caída de 1% en el 2013, nos coloca muy lejos de la tasa de crecimiento de años anteriores, que bordeaba el 30%. Dentro de éstas, las agroexportaciones continúan siendo la estrella en términos de crecimiento (22%), seguido por pesca (11.8%), textiles (11.5%) y metalmecánica (6.5%).
En este último, sin embargo, hay una distorsión estadística producto de la reexportación de maquinaria y equipo. Asimismo, las agroexportaciones han perdido fuerza en el último trimestre y los textiles se han frenado por los problemas económicos que aquejan a Venezuela.
No obstante, los subsectores que aportaron mayor valor agregado son los que enfrentan un panorama más negativo. Así, las prendas de vestir cayeron más de 14% debido a que están siendo desplazadas del mercado norteamericano por la competencia del Asia y Centroamérica y porque el mercado venezolano está prácticamente cerrado.
Una caída similar se registró en siderometalúrgica, mientras la minería no metálica cayó algo más de 8% y el sector químico (-0.3%) completaron un panorama crítico para el sector industrial exportador.
Nuevos destinosEn este contexto, en el que el consumo en los grandes mercados de Europa y Asia no termina de recuperarse y muchos países imponen restricciones a la libre competencia, es imprescindible entender la lógica de la exportación no tradicional.
Esta requiere de una constante inversión para mantenerse competitiva frente a la agresión de gobiernos proteccionistas (como Ecuador, Argentina o Venezuela) que obliga a buscar nuevos destinos con todo el esfuerzo y tiempo que ello conlleva.
"Este es el momento en que el sector público y el sector privado deben alinear esfuerzos para revertir lo que ya es una tendencia negativa en las exportaciones. No es suficiente anunciar que queremos dejar de ser una economía primario-exportadora: se tiene que adoptar medidas concretas para alcanzar ese objetivo", señaló el presidente de Adex.
"Por ello hacemos votos para que el MEF que ha sido impermeable al diálogo hasta ahora cambie su actitud y recapacite sobre la importancia estratégica de largo plazo que tiene la exportación de valor agregado para nuestro país", agregó.
En efecto, lejos de plantearse políticas de emergencia para evitar el colapso de la industria exportadora, se toma la errada e inoportuna decisión de reducir la tasa del drawback, lo que compromete la viabilidad de muchos exportadores, alejando la posibilidad de consolidar una nueva plataforma exportadora.
"Las exportaciones peruanas cerraron el 2014 de la peor manera que hubiéramos deseado", señaló el líder de Adex.
"Lamentablemente, no tenemos nada a la vista que nos haga pensar que las condiciones cambien en el 2015. Percibimos de parte del MEF una resignación frente a los factores externos, una concentración de esfuerzos en los estímulos fiscales y una excesiva esperanza en la recuperación de la producción minera, lo que lo lleva a seguir postergando las indispensables reformas internas. En esta línea, terminaría siendo un quinquenio perdido para las exportaciones", concluyó.